La Diócesis de Tlaxcala lamentó que el Congreso local haya aprobado reformas al Código Civil para equiparar las uniones entre personas del mismo sexo con el matrimonio, en virtud de que el significado de este último es la “capacidad para la maternidad”, lo que resulta “imposible en una unión homosexual”.
Ante ello, el obispo Julio César Salcedo Aquino llamó a los católicos, y de manera especial “a las religiosas y a los religiosos, así como a los agentes pastorales para que den a conocer más y difundan la Doctrina de la Iglesia respecto al matrimonio, contenida en el Catecismo de la Iglesia Católica (1601-1666) en los que se detalla la naturaleza, los bienes y los fines del matrimonio”.
En ese documento, refiere:
“la alianza matrimonial, por la que el varón y la mujer constituyen entre sí un consorcio de toda la vida, ordenada por su misma índole natural al bien de los cónyuges y a la generación y educación de la prole, fue elevada por Cristo nuestro Señor a la dignidad de sacramento entre bautizados”.
La Diócesis de Tlaxcala emitió este comunicado después de que, el pasado martes, la LXIII Legislatura local aprobó con 16 votos a favor y tres en contra una serie de reformas al Código Civil para el estado de Tlaxcala con la finalidad de permitir el matrimonio entre personas del mismo sexo, noticia que alcanzó repercusión a nivel nacional y que fue festejada por diversos sectores sociales.
Ante ello, el obispo advierte que la “Iglesia Católica es clara en su doctrina respecto al matrimonio y lamentamos equiparar las uniones homosexuales al matrimonio (…) Etimológicamente no hay forma de equiparar el término matrimonio, que significa capacidad para la maternidad, algo imposible en la unión homosexual”.
Refiere que el papa Francisco ha manifestado que las personas que, por su preferencia sexual, deciden vivir en pareja no deben ser discriminadas ni rechazadas, además, deben ser salvaguardados sus derechos como el acceso a la salud y al patrimonio, entre otras garantías.
“El papa pidió con claridad que las legislaciones buscaran figuras jurídicas que permitieran la salvaguarda de estos derechos, pero que no quisieran equiparar dichas uniones con el matrimonio. Lamentablemente, las legislaciones insisten en llamar matrimonio a esas uniones, como de hecho ya pasó en Tlaxcala”.
En el comunicado, igualmente firmado por el secretario canciller de la Diócesis de Tlaxcala, José Sánchez Cortés, apunta:
“somos conscientes de que vivimos en una sociedad plural, tolerante y global. Celebramos y respetamos los esfuerzos de las legislaturas que buscan la eliminación de toda forma de discriminación en favor de las minorías y de quienes están siendo afectados en sus derechos laborales”.
“Al mismo tiempo, hacemos un llamado para que se respeten los derechos de las mayorías, así como los valores que sostienen a la sociedad: el respeto a la vida desde su fecundación hasta su muerte natural, el matrimonio y la familia”