Efraín Núñez
El Sol de Puebla
Martes 26 de enero de 2016
Entre golpes, empujones e intimidaciones de guaruras contratados por la corriente Nueva Izquierda, el Consejo Estatal del PRD, celebrado en la ex Hacienda de Chautla, se dividió entre los integrantes de Nueva Izquierda (NI) que aprobaron la política de alianzas para ir con el PAN y los antialiancistas que votaron por mayoría en contra de ir con Acción Nacional.
Después de las 12:00 horas, el vicepresidente del Consejo, Jorge Benito Cruz Bermúdez, explicó en rueda de prensa que los integrantes de NI reanudarían la sesión que previamente habían recesado, para sacar adelante la orden del día.
En esa primera aparición negó las acusaciones de compra de votos, la presencia de elementos de seguridad, el acoso de los policías, así como una “desesperación” de su parte para aprobar la alianza con el PAN.
Después de las 14:00 horas el también director del Comité Administrador Poblano para la Construcción de Espacios Educativos (CAPCEE) manifestó que en sesión “privada” se aprobó una posible alianza con Acción Nacional con un respaldo de 113 votos de los consejeros de NI.
El argumento para realizar la sesión en una sede alterna a la que originalmente se había planteado fue la violencia con la que supuestamente los integrantes del FIP, ADN e IDN, lo que no generó “condiciones” para llevar a cabo la asamblea.
Al finalizar la jornada, la Comisión Nacional Electoral del Comité Ejecutivo Nacional avaló la sesión en la que el Frente de Izquierda Progresista (FIP), Alternativa Democrática Nacional (ADN) e Izquierda Democrática Nacional (IDN) aprobaron las alianzas solo con partidos de izquierda; no así la encabezada por Nueva Izquierda.
EL ZAFARRANCHO
De entre los consejeros las sillas volaban al tiempo que Eric Cotoñeto Carmona, presidente del Consejo Estatal del PRD, ingresaba por la mañana al salón de sesiones acompañado de los integrantes del Frente de Izquierda Progresista (FIP), la corriente del senador Luis Miguel Barbosa Huerta.
Los recién llegados, frenados por guaruras en dos frustrados retenes en las puertas del hotel Mission Grand, voltearon el tablón en el que presidían tres miembros de la Mesa Directiva, que inició la asamblea sin la presencia del presidente, Cotoñeto Carmona, lo que viola los estatutos del Sol Azteca.
La escena evocaba al histórico conflicto entre “las tribus” del PRD, solo que esta vez fue aderezado con la consigna de una supuesta intromisión del Gobierno del Estado.
Aunque parecieran comunes los golpes entre perredistas, en esta ocasión eran propinados por los elementos de seguridad hacia los consejeros, lo mismo hombres que mujeres a quienes se les negaba el paso por “órdenes superiores”.
Previamente, un camión con consejeros del FIP fue interceptado sobre la autopista México-Puebla. Como si se tratase de un vehículo oficial los elementos lo escoltaron en un acto que fue interpretado por los pasajeros como “intimidación”.
Más adelante otro vehículo les cerró el paso y finalmente un trascabo les impidió seguir hacia la ex Hacienda de Chautla.
El objetivo era ganar tiempo. Jorge Benito Cruz, vicepresidente del Consejo, abrió la sesión sin los antialiancistas. Nueva Izquierda pretendía votar con 103 consejeros una posible política de Alianzas con el PAN.
Por eso impidieron el paso a Eric Cotoñeto, pese a que tanto él como Roxana Luna Porquillo, líder de ADN, habían aceptado entrar a la mesa de negociaciones con el diputado federal, Luis Maldonado Venegas.
“Se abrirá la sesión”, fustigó el ex secretario general de Gobierno a sus interlocutores antes de intentar acuerdos, lo que prendió los ánimos.
La orden fue dejar fuera a la prensa, también a los integrantes del Comité Ejecutivo Nacional que acudieron a revisar la validez de la sesión.
Camerino Eleazar Márquez Madrid, secretario de Organización, María Iliana Cruz Pastrana, secretaria de Formación Política y Margarita Guillaumín Romero, secretaria de Fortalecimiento a la Militancia del Comité Ejecutivo Nacional del Sol Azteca fueron detenidos a la entrada del hotel.
Entre empujones lograron colarse con el grupo encabezado por Cotoñeto Carmona, quien recibió codazos en la cara por un individuo barbado con boina blanca, quien nunca se identificó.
Cruz Pastrana encontró a Luis Maldonado en el patio de entrada, a quien le reclamó por el trato que recibían pese a ser integrantes del CEN.
Maldonado Venegas no tuvo respuestas. Solo miraba a unos y otros funcionarios de su partido con expresión de excusa.
María Iliana Cruz denunció ante los medios de comunicación la intimidación hacia los consejeros antialiancistas que fueron detenidos en la carretera, a quienes pedían sus generales y apuntaban las placas de sus automóviles.
Los integrantes del CEN pasaron sin problemas el segundo retén, ubicado a la entrada del salón de sesiones del hotel, custodiado por un elemento de seguridad, quien portaba una chamarra de cuero color negro.
Sin embargo el presidente del Consejo no tuvo el mismo recibimiento. Allí inició el zafarrancho en el que Eric Cotoñeto, así como consejeros de ADN impidieron que el guarura, apoyado por más elementos de seguridad, cerrara las puertas.
EL NO A LA ALIANZA CON EL PAN
Con los antialiancistas en el salón de sesiones iniciaron las arengas. “Fuera Moreno Valle y los fascistas”, exaltaban los consejeros del FIP y ADN. “Coalición” y “fuera el PRI” contestaban los de Nueva Izquierda.
Un perredista del FIP arrebató las hojas de registro a uno de sus compañeros de Nueva Izquierda. Los afines al gobierno del estado golpearon a Ruth Ramos, quien intentaba dialogar con Jorge Benito Cruz.
Cotoñeto Carmona recuperó su lugar en la mesa. Aturdido y asustado por los empujones, Jorge Benito Cruz dejó el salón. Entre la confusión salieron uno a uno los integrantes de NI con la promesa de regresar. No cumplieron.
A los proaliancistas apenas les dio tiempo de abrir la sesión y aprobar la orden del día. Sin saber que más hacer decretaron un receso y se refugiaron con Luis Maldonado en uno de los salones contiguos, donde supuestamente sesionaron para avalar su política de alianzas con el PAN.
El FIP, ADN e IDN lograron mantener el quórum de la sesión, por lo que no fue suspendida y finalmente fue avalada por la Comisión Nacional Electoral.
Después de las 13:00 horas la sesión se reanudó y la mayoría antialiancista rechazó ir con el PAN y determinó que el próximo candidato a la gubernatura saldrá de las filas del Sol Azteca.
Erika Moreno, presidenta de la Comisión Electoral, manifestó que en el artículo 49 de los estatutos establece que el retiro unilateral de una parte de los consejeros una vez establecido el quórum no afectará la validez de los acuerdos.