Tehuacán. La tradición del Día de la Cruz para el sector de la construcción ha ido en decadencia afectando la economía de quienes se dedican a la elaboración de cruces, lo cual obedece a diferentes factores entre ellos el económico, consideró Roberto Mendoza, artesano y comerciante de cruces
Por su parte albañiles de esta ciudad añadieron el fenómeno migratorio, al explicar que muchos trabajadores de la construcción han dejado de lado esa actividad por los pagos bajos que recibían, para irse a trabajar a Estados Unidos, lo cual ha provocado una importante disminución de mano de obra en ese sector.
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Roberto Mendoza Observó que Tehuacán hay pocas construcciones en proceso, por lo cual para él la principal causa es la falta de recursos económicos que lleva a las personas a posponer sus proyectos de edificación, al no haber estos trabajos son pocos los lugares donde se harpa la celebración.
Manifestó que desde el año pasado la venta de cruces fue muy baja, lo que le provocó pérdidas monetarias puesto que se preparó con más de 400 cruces y la mayoría se le quedaron, motivo por el que en este 2024 optó por elaborar solo 100 “para no perder la tradición”.
Cada 3 de mayo los trabajadores de la construcción que se encuentran en alguna obra, sobre todo privada, compran una cruz, tradicionalmente debe medir entre 80 y 90 centímetros, luego de llevarla a bendecir a la iglesia se coloca en el lugar donde se realiza el trabajo. Por su parte el propietario de la obra tiene el deber de ofrecer una comida especial para sus albañiles
En Tehuacán, el lugar con el mayor número de trabajadores de la construcción es Santa María Coapan y es donde se da la mejor venta de cruces, explicó Roberto Mendoza quien confió en que este año obtenga una buena venta en esa junta auxiliar.
Para algunos albañiles de Tehuacán, hay otra razón por la que el Día de la Cruz ya no se celebra como en años anteriores, se trata de la disminución de trabajadores en ese sector, ya que un importante número de personas dedicadas a ese oficio han desertado por los bajos salarios.
La mayoría de ellos decidieron migrar hacia Estados Unidos reveló José Antonio, quien indicó que los que siguen tratan de mantener la tradición, pero de igual manera hay patrones que ya no quieren apoyarlos, en algunos casos para ahorrarse la inversión de la comida y en otros por el tema de la religión, ya que esta tradición está ligada a la iglesia católica.