Un suicida hizo detonar los explosivos que llevaba en su chaleco en el interior de una escuela del distrito número 18, en la zona chií de Kabul mismo que provocó al menos 48 muertos y otros 67 heridos.
“Se trata de un centro educativo privado en el que estudian principalmente menores, tanto niños como niñas”, afirmó el jefe del Departamento de Investigación Criminal de la policía de Kabul, en su grupo oficial de Whatsapp.
El portavoz del Ministerio, Waheed Majrooh,informó que las víctimas y los lesionados fueron trasladados a varios hospitales en Kabul, muchos de ellos graves, por lo que teme que el número de muertos aumente.
Aun ningún grupo ha reclamado la autoría de la acción. En un comunicado del Palacio Presidencial Ashraf Gani presidente afgano, afirmó que atacar este tipo de instituciones va en contra de las “enseñanzas islámicas” y ordenó a las autoridades que investiguen a fondo lo sucedido y proporcionen ayuda “inmediata” a las víctimas.
La misión de la ONU en Afganistán (UNAMA) ha expresado su indignación por este incidente y, en un mensaje publicado en Twitter, ha subrayado “que no hay ninguna justificación para atacar a civiles, en ningún momento y bajo ninguna circunstancia”.
En lo que va del año Kabul ha sido víctima de un gran número de ataques, el último fue a finales de julio y tuvo lugar cerca del Aeropuerto Internacional, el ataque causó 23 muertos y 107 heridos mismo que se adjudicó el grupo Yihadista Estado Islámico (EI).