Hugo Salado Del Razo, representante de la Coordinadora Estatal del Transporte (CET), declaró que los concesionarios están en “quiebra total”, debido al impacto de la emergencia sanitaria por Covid-19 en la economía de este sector, por lo que solicitó la condonación del pago de refrendo y de renovación de licencia.
Anotó que las medidas de prevención implementadas para evitar el contagio del virus entre la población, principalmente la suspensión de clases y de algunas labores, así como el confinamiento, “fue un duro golpe para la economía de los transportistas, casi acabó con nosotros, hubo un destroce”.
La demanda del servicio colectivo de pasajeros se redujo aproximadamente 90 por ciento y a la fecha, en el caso de Tlaxcala todavía estamos en ‘semáforo rojo’; solo estamos en espera de “luz verde” para dialogar con las autoridades “y ver de qué manera puede apoyar… que el descuento en licencia y refrendo sea de 100 por ciento”, expuso.
Comentó que el gobierno federal otorgó algunos “préstamos condicionados”, a los que solo cinco por ciento de transportistas habría recurrido, pues el resto, que es la gran mayoría, no lo hizo porque significaría enfrentarse a problemas para pagar, sobre todo quienes de por sí tienen alguna deuda.
“No se nos ha apoyado absolutamente en nada; en algunos estados regalaron despensas; aquí desgraciadamente no tuvimos ningún tipo de respaldo”, remarcó.
En su opinión los esquemas de descuento anunciados por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes del Estado (Secte) para apoyar tanto a automovilistas particulares como públicos durante esta emergencia sanitaria, “son insuficientes, porque con esta recesión económica de dónde vamos a agarrar para pagar refrendo y recuperar licencias”.
Apuntó que solo ha trabajado 20 por ciento de transportistas, por lo que el 80 restante “quedó sin ingresos”. Se había planteado –añadió– la suspensión de pagos a arrendadoras, ya que 70 por ciento del parque vehicular son unidades fiadas y algunos tienen problemas para liquidar. “Nos dejaron solos”.
Hugo Salado Del Razo recalcó que este sector requiere del apoyo del gobierno estatal, de ahí que de manera oficial solicitará atención. “No estamos pidiendo un préstamo, sino que se condonen los pagos; quedamos desprotegidos”.
Anterior a la pandemia se transportaba también a obreros, pero a partir de la contingencia las empresas habilitaron unidades para trasladar a su personal, del que solo cerca de 20 por ciento es tlaxcalteca, el resto es poblano, lamentó.
“Mientras que una parte de burócratas, amas de casa y la totalidad de estudiantes están resguardados en sus casas, por lo que nos quedamos con las pocas personas que obligatoriamente tuvieron que salir a trabajar”.
Se pensó que este 1 de junio, con el regreso de trabajadores de algunos sectores productivos, la movilidad se reactivaría, “pero no fue así, la gente salió con miedo y nuevamente se resguardó porque todavía no existen condiciones en Tlaxcala”.
El representante de la CET reiteró que los prestadores de este servicio “nos sentimos incapaces económicamente” para realizar los pagos de este año.