Desde el viernes pasado se normalizaron las actividades en los juzgados del Poder Judicial Federal en Puebla tras el paro que los empleados de los mismos realizaron, informó José Alfredo Arroyo Razo, quien es doctor en Derecho, catedrático e investigador de la Escuela Libre de Derecho de Puebla, quien indicó que no se han registrado afectaciones en el desahogo de los expedientes.
El especialista reiteró que, como lo señaló el presidente Andrés Manuel López Obrador, la extinción de 13 fideicomisos del Poder Judicial no afecta el pago de salarios y prestaciones del personal pues esos rubros no se utilizaban para el pago de servicios personales. “Las partidas no están relacionadas con el pago de salarios”, acotó.
En entrevista con La Jornada de Oriente, el jurista refirió que los litigantes con los que ha tenido contacto no reportaron afectaciones en el desahogo de los expedientes debido a que los términos procesales quedaron “congelados” durante el paro de labores que el personal realizó hace dos semanas, es decir, no corrieron los plazos para la resolución de los mismos.
Dijo que desde el pasado viernes, los trabajadores de los juzgados iniciaron labores y que este lunes laboraron con normalidad.
Es necesario recordar que los empleados del Poder Judicial Federal, incluidos los que se encuentran en Puebla, realizaron un paro de labores de cuatro días en protesta por la desaparición de 13 fideicomisos, lo que implicó el cierre de 19 juzgados, de los cuales 10 son colegiados.
Sobre el tema, el jurista indicó que los fideicomisos en cuestión no están relacionados con el pago de prestaciones y salarios, por lo que su eliminación no afectaría esos conceptos.
Explicó que, por ejemplo, el personal de seguridad de los juzgados es contratado por una empresa privada, en tanto que secretarios, oficiales judiciales (escribientes), actuarios y secretarios, que tienen la mayor carga de trabajo, son parte de la base trabajadora cuyos salarios no están relacionados con los fideicomisos en cuestión.
Los 13 rubros que fueron eliminados, dijo, tienen que ver con ejercicios presupuestales para magistrados y ministros, mientras que el resto de personal, que es de menor jerarquía, no tiene que ver con dichos conceptos que fueron afectados.
“La gente que salió a luchar por sus defectos es gente que sí trabaja pero que no serán afectados por los fideicomisos”, comentó.