La defensa de la vida desde la concepción y el fortalecimiento al órgano garante, “actualmente acéfalo”, entre otras cosas, planteó la panista Adriana Dávila Fernández, candidata al gobierno, durante el foro de propuestas en materia de derechos humanos, en el que participaron organizaciones no gubernamentales.
Dio lectura a un documento en el que incluyó “muchas de las preocupaciones de la sociedad civil” y un plan para vigorizar la participación de ésta y a las instituciones encargadas de proteger y dar vigencia a los derechos, no sólo de libertad, dignidad y a la vida, sino también económicos, sociales y culturales.
“Se necesita forzosamente tener una visión distinta respecto de lo que pasa en Tlaxcala en la materia”, expuso la candidata. Luego, mencionó algunos datos del Diagnostico Estatal presentado por la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) en 2015, el cual coloca a los servidores públicos “en alto riesgo” de vulnerar estas garantías.
Gil atestigua propuestas de Dávila
A este foro, que inició con retraso, asistió el senador de la República panista, Roberto Gil Zuarth, quien señaló que la primera violación de derechos humanos es la ausencia de gobierno y de instituciones para resolver los problemas sociales.
Reconoció que han sido las organizaciones civiles las que han puesto la agenda en este tema y llamado la atención, además, han suplido a los gobiernos y a las instituciones, por lo que la participación de la sociedad es vital no sólo para visibilizar problemas, sino para resolverlos.
“Aquí –observó– en Tlaxcala hay un problema de institución de derechos humanos, la Comisión Estatal está francamente olvidada, entrampada en un problema de nombramiento y en un diseño institucional muy deficiente”.
Señaló que no existe en la entidad un sistema de atención a víctimas y que muchas organizaciones no gubernamentales están “prácticamente abandonadas y solas en este esfuerzo cívico–ciudadano, por sus respectivas agendas, desde niños hasta adultos mayores”.
Dijo que para procurar un programa en esta materia se requieren tres cosas: visión, idea clara y sensibilidad, “y –dijo– no hay nadie más que pueda hacerlo, que Adriana Dávila Fernández. Nadie puede poner en duda su voluntad política”.
Con el senador coincidieron algunos representantes de organizaciones civiles, en el sentido de que la CEDH les “ha cerrado las puertas” y negado apoyo. Instaron a la creación de nuevas políticas públicas en “muchos temas que lastiman al estado”. Se pusieron a disposición de la panista para crear una red fuerte y organizada.