El Comité Ejecutivo Estatal de Morena denunció una acción concertada en la persecución y agresión física que sufrió un grupo de brigadistas en el sur de la capital poblana, ya que los elementos policiacos del estado y el municipio se negaron a frenar el hostigamiento perpetrado por personas que se identificaron como miembros de la organización priista Movimiento Antorchista Nacional.
Carlos Figueroa Ibarra, secretario de Derechos Humanos, y Gabriel Biestro Medinilla, presidente del Consejo Estatal, responsabilizaron a la administración de Rafael Moreno Valle de la violencia ante los vínculos políticos que tiene con esa agrupación política.
En una conferencia de medios explicaron que el ataque ocurrió el domingo pasado en las calles Artículo 17 y Prolongación de la 3 Sur, cuando ocho personas interceptaron los dos automóviles de perifoneo que difundían propaganda electoral de Morena correspondiente al Distrito XI.
“Nuestros compañeros y vehículos fueron agredidos a pedradas (…) los agresores se identificaron como integrantes del PRI y de Antorcha Campesina y con lujo de violencia verbal hicieron ver que Morena no tenía nada que hacer en ese lugar que era ‘su territorio’”, detallaron.
La segunda acometida, prosiguieron, ocurrió 25 calles adelante, frente a la escuela Escudo Nacional, ubicada en las vialidades César Vallejo y Mariano Azuela, de la Constitución Nacional.
“Sucedió que nuestros brigadistas pudieron salir del lugar de la primera agresión, pero fueron perseguidos por taxistas y personas que viajaban en bicicletas (…) allí lograron abrir con llave maestra la puerta de uno de los vehículos y fueron golpeados dos de nuestros compañeros.
“Aproximadamente 150 personas rodearon a nuestros compañeros, quienes pese a sus insistentes llamadas al 066 no fueron auxiliados en ningún momento por ninguna de las fuerzas de seguridad pública; por el contrario, la multitud gritaba que había que llamar al comandante de la zona para que ‘les pusiera en la madre’”, narraron los dirigentes de Morena.
Carlos Figueroa puntualizó que dos patrullas de la Policía Municipal presenciaron el primer incidente de violencia, pero los elementos de seguridad se rehusaron a intervenir.
Al final, en la colonia Constitución Nacional, se presentaron policías asignados a la región Centro Sur, quienes pidieron a las víctimas una cuota de 500 pesos que se entregó a una de las mujeres antorchistas a cambio de la cual la turba accedió a liberarlos.
El secretario de Derechos Humanos de Morena aclaró que el partido no detendrá la campaña política en el Distrito XI, pese al hostigamiento, ni pedirá seguridad especial para sus candidatos, ya que la autoridad estatal y municipal tiene la obligación de garantizar la integridad de todos los ciudadanos.
“La seguridad no se mendiga, la seguridad debe ser para todo el pueblo y no se pacta; es obligación y responsabilidad del gobierno”, destacó a su vez Gabriel Biestro, quien aclaró que el Movimiento Regeneración Nacional no asistirá a las mesas de seguridad que instaló el gobierno del estado con los partidos para este proceso electoral, pues acusó que solo tienen fines mediáticos.