El candidato a la gubernatura de la coalición Juntos Haremos Historia, Luis Miguel Barbosa Huerta, arrancó campaña con el compromiso de derogar la Ley Bala, revocar la privatización del agua e impedir los “proyectos de muerte” que se detonan en el estado en materia energética y minera.
Asimismo, aclaró que no tiene la intención de habitar la residencia oficial del gobernador, Casa Puebla, al considerarla una muestra de “fantochería”, por lo que lo convertiría en un Centro Cultural para Pueblos Indígenas de ganar los comicios del 1 de julio.
Barbosa arrancó campaña con un acto masivo en el que dio a conocer las propuestas del bloque lopezobradorista para Puebla, donde además denunció que el ex gobernador Rafael Moreno Valle Rosas pretende mantenerse en el poder a través de su esposa, Martha Érika Alonso Hidalgo, abanderada de la alianza “Por Puebla al Frente” al Poder Ejecutivo local.
Juntos Haremos Historia va por 1.5 millones de votos
Acompañado por los candidatos federales y locales de Juntos Haremos Historia; los dirigentes de las tres fuerzas políticas que integraron esa coalición, Morena, PT y el Partido Encuentro Social (PES); así como simpatizantes del frente, Barbosa afirmó que la apuesta de la coalición es llevarse carro completo en los comicios del 1 de julio, es decir, ganar todos los cargos de elección popular que se encuentran en juego.
En entrevista posterior, aseguró que el triunfo del frente lopezobradorista es posible porque las encuestas lo ubican en el primer lugar de las preferencias y hasta con 12 puntos de ventaja sobre Martha Érika Alonso.
Indicó que el objetivo de Morena, PT y el PES en los 60 días que durará la campaña a gobernador, diputados locales y presidentes municipales es ganar 1 millón 500 mil votos.