A medio año del sismo, más de 200 familias habitan 110 casonas viejas y edificios apuntalados, los cuales podrían sucumbir en cualquier momento, advirtió este martes el Gerente del Centro Histórico de Puebla, Sergio Vergara Berdejo.
Lo anterior durante su comparecencia ante las comisiones del Centro Histórico, Turismo Arte y Cultura, y Desarrollo Urbano y Medio Ambiente, como parte de la glosa del cuarto informe de labores del alcalde de Puebla, Luis Banck Serrato.
El funcionario municipal deslindó al ayuntamiento de Puebla de los posibles derrumbes, tras asegurar que los inmuebles están en esta situación por culpa de particulares; sin embargo, luego reconoció que fue un desastre natural.
A pesar de ello, dijo que los edificios están en constante monitoreo por parte de la dirección de Protección Civil Municipal.
El 19 de septiembre pasado, informó que más de mil 200 edificios del Centro Histórico de Puebla sufrieron algún daño en su estructura por el movimiento telúrico que tuvo epicentro entre los límites de Puebla y Morelos.
Vergara Berdejo informó que han tratado de convencer a las familias para que abandonen sus viviendas, las cuales en su mayoría rentan, pero se niegan por la falta de recursos y ante el temor que sean saqueados.
“Es una obligación porque, como ellos dicen y tienen razón, no hicieron el deterioro, es algo natural, pero al final hay una corresponsabilidad por el riesgo que podría haber hacia las personas”, refirió.
Esto luego que el fin de semana, una barda de una de las viviendas se derrumbara y cobrara la vida de una persona.
Por esta razón, el gerente del Centro Histórico de Puebla indicó que están hablando y mandando oficios exhortando a los propietarios de los inmuebles a que cumplan con la parte que les corresponde.
Asimismo, informó que hizo una gestión de recursos ante la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), a fin de que se consigan recursos extraordinarios para la habilitación de las viviendas.
Al respecto, el ex perito del INAH, Sergio Vergara Berdejo, reconoció que la ayuda de 15 y 30 mil pesos a cada familia poco les sirve para levantar los daños causados por el sismo de hace medio año.
Gran parte de los inmuebles que se encuentran apuntalados se ubican en las calles 6 y 8 Poniente, así como en las inmediaciones al tianguis de artesanías el Parián, a un par de calles de distancia del zócalo de la ciudad.
En otro tema, el funcionario anunció que un grupo de empresarios poblanos invertirán 60 millones de pesos para detonar económicamente el antiguo barrio de El Alto, donde se contemplan la construcción de viviendas y la rehabilitación del mercado.
Sin dar a conocer los nombres de los inversionistas, Vergara Berdejo precisó que tienen un 70 por ciento de acuerdo con ellos, por lo que en las próximas semanas podrían iniciar los trabajos que concluirían en este mismo año.