Ayer trascendió al ámbito público la disputa que hay en el Sindicato de Trabajadores del Colegio de Bachilleres del Estado de Puebla (Sitracobp), pues cuando un grupo de afiliados manifestaba en una rueda de prensa su inconformidad con la permanencia de Ricardo Ordaz Pérez como secretario genera, otro expresó su apoyo al líder.
Un grupo de disidentes encabezado por Jorge Rosas Yáñez convocó a los medios para denunciar que Ordaz Pérez usurpa el cargo, ya que fue reelecto en un proceso amañado, pues no hubo una convocatoria adecuada para su ratificación en el cargo:
“Ricardo está usurpando un puesto que ya no le corresponde, como secretario expiró desde el 14 de abril de 2015”.
Acompañado de media docena de inconformes con el actual secretario general, Rosas Yáñez habló de varias anomalías cometidas o consentidas por el actual secretario general, como la modificación al Contrato Colectivo de Trabajo para escamotear prestaciones de fin de año y el pago de gastos funerarios, acciones que supuestamente Ordaz Pérez confabuló con Adrián Briones Zapata y Julián Otero Sánchez, respectivos directores administrativo y académico del Colegio de Bachilleres.
Asimismo, Jorge Rosas Yañez, dijo que hasta la fecha, Ricardo Ordaz Pérez no les ha entregado a muchos maestros afiliados al Sitracobp las horas que darán de clase, lo cual los mantiene en zozobra.
Aseguró que el actual líder de la organización gremial mantiene una política de terror y que es posible que tome represalias contra sus opositores, por lo que, de no hacerse caso a su petición para que Ordaz Pérez dimita, más de mil afiliados al sindicato se manifestarán durante la fiesta de graduación que los estudiantes del Colegio de Bachilleres tendrán el 15 de agosto en el un salón del Instituto Mexicano del Seguro Social ubicado en Zavaleta.
“Exhorto a Ordaz que nos sentemos a platicar, no ha hecho avances, todo ha sido en detrimento” de la base trabajadora”, apuntó Jorge Rosas Yañez.
Al tiempo que Rosas Yañez y sus compañeros ofrecían la rueda de medios, afuera del recinto una media centena de prosélitos de Ricardo Ordaz Pérez, expresaban con pancartas y gritos su respaldo al secretario general, al tiempo que clamaban denuestos contra su principal detractor:
“Rosas no es docente, Rosas no es docente. Rosas es un delincuente, Rosas es un delincuente”, le espetaban.