La presidente estatal del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Socorro Quezada Tiempo, pidió mandar a la congeladora la iniciativa panista que incrementa el tiempo en prisión por realizar pintas, al acusar que criminaliza una forma de expresión.
En entrevista, la también diputada local anunció que la bancada del sol azteca revisará con más detalle la propuesta, pero de entrada consideró excesivas las sanciones que se proponen.
La iniciativa es impulsada por el presidente de la Comisión de Gobernación y Puntos Constitucionales, el albiazul Eukid Castañón Herrera, y ya recibió el respaldo del gobernador Rafael Moreno Valle Rosas.
Al presentar la propuesta al pleno el miércoles pasado, Castañón afirmó que las nuevas disposiciones permitirán defender la propiedad privada y pública del “pandillerismo”, al tiempo de alertar el riesgo de “un posible reclutamiento de organizaciones delictivas”.
Ayer, Socorro Quezada lamentó que se pretenda equiparar la pinta de grafitis con actos vandálicos, porque se trata de una forma de expresión que es catalogada por algunas sociedades como arte.
“De ninguna manera tiene relación con la delincuencia”, destacó la representante popular que preside la Comisión de Organizaciones No Gubernamentales y es vocal de la Comisión de Seguridad Pública.
Socorro Quezada concedió la entrevista después de encabezar una conferencia de medios en el palacio legislativo, donde anunció la realización de un foro sobre la Ley General de Salud en materia de pensiones, que se llevará a cabo el 3 de febrero en el salón Miguel Hidalgo del Congreso.
En la rueda de prensa estuvo presente Manuel Picazo Gómez, presidente de la coalición de organizaciones de pensionados, viudas y jubilados por el seguro social del estado de Puebla y Tlaxcala.
Picazo informó que una de las acciones que se impulsan es la ratificación por parte del Senado de la República de una iniciativa que deroga el párrafo tercero del artículo 183 de la Ley del Seguro Social.
El apartado, explicó, obliga a los trabajadores de antigüedad dados de baja a cotizar por segunda ocasión 53 semanas para que les vuelvan a reconocer sus derechos, lo cual resulta imposible debido a que se trata de personas en edad avanzada que difícilmente volverán a ser asegurados.