Advierten Eduardo Rivera y Jorge Cruz “mano dura” para proteger el Centro Histórico tras enfrentamiento con ambulantes

El edil Eduardo Rivera Pérez y su secretario de Gobernación municipal, Jorge Cruz Lepe, advirtieron que aplicarán “mano dura” respecto a los vendedores informales si es que intentan tomar de nueva cuenta el zócalo y avenidas importantes de la ciudad como el Centro Histórico.

Tras ser cuestionado por la fracción de regidores de Morena por “reprimir” a los ambulantes que intentaron tomar el zócalo el jueves por la tarde, este viernes Eduardo Rivera sostuvo que la intervención de la policía puede o no gustar pero en “Puebla hay presidente municipal y va a haber orden y autoridad”.

Sostuvo que el uso de la fuerza pública se hizo porque los vendedores ambulantes agredieron a un policía y un funcionario de la Secretaría de Gobernación municipal, a uno de los cuales le abrieron la ceja lanzándole una botella en la cabeza.

Subrayó que se tomó la determinación de que ingresara la Policía municipal porque en caso contrario el cuestionamiento hacia su gobierno sería que no actuó la corporación.

“No vamos a ceder ni un solo paso. Estamos dispuestos a dialogar, no vamos a caer en provocaciones pero no vamos a permitir que se vuelvan a adueñar de estos espacios que son de todo los poblanos”, expuso.

Aunque este jueves fue evidente que se terminó el diálogo entre el gobierno municipal y el Frente de Vendedores Tradicionales y Comerciantes en General del Estado de Puebla A.C., cuyos integrantes intentaron apoderarse del zócalo, el alcalde afirmó que sí ha funcionado su estrategia debido a que se han liberado zonas y calles importantes.

Sin embargo fue Jorge Cruz Lepe, acusado por organizaciones como la 28 de Octubre de amenazar a sus agremiados, quien expresó una postura más enérgica respecto a los hechos del jueves, al afirmar que el gobierno usará la “mano dura” si es necesario.

“Se estira la liga. No lo vamos a permitir, tenemos gente en las inmediaciones del zócalo. Hay que inhibirlas y vamos a actuar con mano dura”, subrayó.

Incluso subrayó que tuvo un encuentro con la lideresa Teresa Huitzil, a quien le advirtió que si se instala el ayuntamiento actuará.

“Todo tiene un límite. No podemos permitir que esta gente bajo el supuesto derecho al trabajo provoque desorden. Al momento de sentarme con ella, le advertimos que si se vuelve a instalar haremos lo que tenemos que hacer”, sostuvo.