Más de mil 200 centroamericanos que integran la Caravana Migrante arribaron entre la noche del sábado y el transcurso del domingo a la ciudad de Puebla en busca de refugio, alimento y seguridad, en su tránsito hacia Estados Unidos.
El gobernador del estado de Puebla, José Antonio Gali Fayad, incluso ofreció empleo temporal a quienes contaran con documentación en regla; asimismo, informó que con personal del Instituto Nacional de Migración (INM) se revisaron documentos para autorizar la estancia legal de algunas personas, sin dar a conocer el número de solicitantes.
Fue el albergue de la iglesia de “Nuestra Señora de La Asunción” la que concentró el mayor número de migrantes, unas 700 personas, quienes durmieron en el templo por la continua lluvia. Otras 400 se instalaron en la iglesia de “Nuestra Señora de los Desamparados”.
Esto debido a que los centroamericanos no confiaron en los dormitorios habilitados por el gobierno municipal y estatal, ante el temor de que fueran deportados.
Las autoridades poblanas y la comunidad católica abrieron cinco albergues para recibir a más de 2 mil hondureños, principalmente, como el Polideportivo de Xonaca y el Dormitorio Municipal.
A pesar del frío, este lunes a las 5 horas los migrantes programaron su partida de Puebla hacia la Ciudad de México.
Desde las primeras horas de este domingo, la ayuda humanitaria se desbordó en Puebla. La mayoría provino de la sociedad civil, la Diócesis y universidades públicas y privadas, como de la UAP, UDLAP, Ibero, Madero y UPAEP. Los servicios corrieron a cargo del gobierno municipal y estatal.
Los vecinos de la colonia Aquiles Serdán distribuyeron cemitas, tamales y café con pan, entre los migrantes. También llegó la ayuda de organizaciones, como la Unión Campesina “Emiliano Zapata” (UCEZ). Su líder Concepción Colotla, quien manifestó conocer la pobreza de Honduras, y habitantes de San Juan Actipan entregaron chicharrón y 250 kilogramos de tortillas.
Asimismo, un grupo de regidores de Morena, encabezado por Rosa Márquez, entregaron ropa, zapatos y pan a los migrantes. Otras mujeres organizadas distribuyeron pañales y artículos de higiene personal.
Para los migrantes consultados la llegada a Puebla es un gran logro porque representa la mitad de camino; además, durante el trayecto ocurrieron una serie de acontecimientos poco comunes: dos mujeres dieron a luz en el tránsito a esta ciudad, y un hondureño radicado en esta capital y una poblana contrajeron nupcias en la iglesia de La Asunción.
Dos camiones desaparecidos podrían estar en Tijuana
El coordinador de la Pastoral Migrante de la Diócesis de Puebla y responsable de recibir a la Caravana, el párroco Gustavo Zárate Rodríguez, informó por la mañana de este domingo que debido a que no hay una organización al interior de la Caravana de Migrantes estuvieron desaparecidos dos camiones con centroamericanos, principalmente niños y mujeres.
Más tarde corrigió que aunque tampoco estaban en el deportivo La Magdalena Mixhuca, en la Ciudad de México, lo más probable es que hayan viajado de manera directa hasta Tijuana.
“Hay rutas de transporte que van de Tapachula a Puebla y de Puebla a Tijuana y pudieron seguir su camino; debemos tener cuidado porque si dejan a los migrantes en la autopista a México cualquiera los puede levantar y se los lleva, estamos pidiendo a las autoridades protección y seguridad para los migrantes”, demandó.
El temor fundado del sacerdote fue que los migrantes hubieran sido cooptados por bandas criminales asentadas en el estado de Puebla, que se ubica en el primer lugar nacional –junto a Tlaxcala– en trata de personas, sumado a que en este territorio se encuentra una base militar de Estados Unidos.
Por esta razón pidió al gobierno federal que otorgue seguridad y acompañamiento a los migrantes para garantizar su integridad y la de sus hijos hasta llegar a la frontera con Estados Unidos.
Por otra parte, la Dirección de Protección Civil del Municipio y la Secretaría de Seguridad Pública del estado comunicaron, a través de sus cuentas de twitter, que hasta el momento no tienen el reporte de migrantes desaparecidos.
Ante la falta de ayuda para el traslado en camiones a la Ciudad de México, algunos integrantes de la caravana han decidido pagar de su bolsa un pasaje hasta Tijuana, mientras que otros no corren con la misma suerte y tienen que iniciar cada día la caminata.
“No son las autoridades, sino los propios migrantes quienes están pagando camiones para trasladarse para llegar a La Magdalena Mixhuca”, precisó el párroco.
Los que no pueden pagar la cuota, comentó, se van de aventón con los traileros o en vehículos particulares.
Hasta Puebla los migrantes han recorrido más de mil kilómetros a pie, desde la frontera entre Chiapas y Guatemala.
Al cierre de esta edición se esperaba el ingreso de una segunda oleada de migrantes, al menos 2 mil personas más, procedentes de Veracruz.
La Caravana de Migrantes que arribó a Puebla este día es la primera de tres que vienen empujando desde Chiapas. Está conformada por un total de 6 mil 327 personas, entre ellos, 2 mil 120 mujeres, mil 907 niños y 2 mil 300 hombres mayores de 14 años.
El segundo contingente está integrado por mil 400 migrantes y está en Ixtepec, Oaxaca, y el tercero con 4 mil indocumentados ya ingresó al estado de Chiapas.
El mayor problema que enfrentan los migrantes es la crisis emocional
A diferencia de otras caravanas de migrantes que han llegado a Puebla esta no cuenta con dirigentes ni “cabezas” al frente de la multitud de familias enteras que vienen huyendo de sus pueblos de origen por la pobreza y la violencia; sin embargo, dentro de esta improvisación también hay organización para una mejor seguridad y convivencia.
“Alguien que venga queriendo robar, fumando marihuana y poniendo el desorden es abandonado o entregado a las autoridades del lugar a donde llegamos”, refirió Joselyn, originaria de Honduras.
La mujer relató: “Venimos muy cansados, desgastados, pareciera que nos quieren obligar a renunciar, pero no podemos hacerlo porque estamos huyendo del hambre y la violencia”.
La declarante agradeció el respaldo de los poblanos, pero dijo que para llegar a esta ciudad sortearon muchos peligros. “En todo el camino de Veracruz veníamos solos y a nuestra suerte, ya nos habían alertado que esta zona es peligrosa, pero por fortuna llegamos bien”.
Para el cura Gustavo Rodríguez Zárate, el mayor problema que presentan los migrantes, además de la inseguridad, es la crisis psicológica y emocional que les ha generado el éxodo, así como los padecimientos estomacales y respiratorios por los diferentes microclimas que han atravesado en la caminata.
“Los niños necesitan atención psicológica, se relajen y cuenten y saquen todo su dolor, no con cualquiera sino con gente profesional”, sugirió.
Algunas familias no solo entregaron chamarras y zapatos a los pequeños, sino además juguetes para hacer “menos pesado” el viaje de las decenas de niños y niñas que viajan juntos a sus madres.
Incluso ya entrada la noche montaron un proyector frente a la iglesia de La Asunción y llevaron palomitas para disfrutar de una película.
Todas las noches la caravana migrante realiza una asamblea en donde determinan las acciones a seguir y las rutas que deben tomar para llegar a la frontera, a fin de evadir a los grupos criminales que los asechan.
CNDH emite medidas cautelares al gobierno de Puebla
Este sábado la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) solicitó al gobierno del estado de Puebla garantizar seguridad, vigilancia y trato humanitario a la Carvana Migrante en su trayecto a la ciudad de México.
La medida cautelar fue para el secretario General de Gobierno, Diódoro Carrasco Altamirano, y el secretario de Seguridad Pública de esa entidad, Jesús Morales Rodríguez, así como a las autoridades federales.
Este organismo nacional solicitó que, de manera coordinada y en el ámbito de sus respectivas competencias, se realicen todas aquellas acciones necesarias para que el tránsito por carreteras y sitios donde se encuentren las personas integrantes de la caminata sean seguros y se salvaguarden sus derechos humanos.