Luego de seis años de lucha legal, los Tribunales Colegiados de Circuito de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) dieron un duro revés al gobierno de Puebla, al publicar este viernes en el Semanario Judicial de la Federación que se sentó jurisprudencia laboral a favor de los trabajadores de base al servicio del estado que fueron despedidos de manera injustificada durante el sexenio del panista Rafael Moreno Valle Rosas.
Un sexenio para que el máximo tribunal del país le diera la razón a los burócratas que fueron rescindidos no solo de manera injusta sino con la agravante de la persecución política por parte de la administración estatal que encabezó el hoy senador de la República por el Partido Acción Nacional (PAN).
En efecto, la mayoría de los empleados fueron echados a la calle hasta por llevar el apellido Marín, como el antecesor del frustrado aspirante a la presidencia de la República.
Moreno Valle pretextó en su momento que las bajas en los precios internacionales del petróleo y el limitado presupuesto estatal obligaban a un “adelgazamiento” (sic) del aparato de trabajadores al servicio de su gobierno, un argumento tan falaz como ilegal, lo cual ha quedado confirmado con la sentencia emitida por la justicia federal.
No solo eso: a la postre quedó claro que no hubo ahorros para el erario, pues a pesar de que fueron corridos 14 mil empleados al menos, las nóminas siguieron teniendo idéntico o mayor costo, por los estratosféricos sueldos que Moreno Valle pagaba a sus colaboradores directos.