Este viernes 10 de junio los aspirantes a la presidencia municipal de Puebla participaron del Conversatorio local. Agenda de gobierno para Puebla. Organizado por el Tecnológico de Monterrey campus Puebla, el conversatorio –que no debate- resaltó por los señalamientos hechos en contra del candidato panista Eduardo Rivera Pérez: la probabilidad que existe de ser inhabilitado de la función pública por la revisión y multa que hay sobre su cuenta pública 2013 como ex presidente municipal de Puebla, y la acusación de que el servicio de agua en la capital se privatizó durante su administración, incluso con su aval.
Ambos señalamientos fueron hechos por el candidato priista Guillermo Deloya Cobián quien, además, al inicio del conversatorio afirmó que Puebla es ahora “una ciudad que lastima, con servicios públicos municipales deficientes, causado por los que desperdiciaron su labor”.
Incluso, enfatizó que no se necesitan “bases puestas sobre gelatina”, ello en alusión directa a uno de los oficios primeros del candidato del PAN Eduardo Rivera como vendedor de este producto.
A lo largo de casi dos horas, reunidos en el auditorio del Tec de Monterrey, los candidatos Eduardo Rivera y Guillermo Deloya, además del Claudia Rivera Vivanco, de la coalición Juntos Haremos Historia; Paola Migoya, del PVEM, y Víctor Gabriel Chedraui, del PSI, expusieron algunas de sus propuestas de campaña.
Sin ataques, pero sí con alusiones y denostaciones directas al aspirante de la coalición Por Puebla al Frente, Eduardo Rivera Pérez, el candidato del PRI Guillermo Deloya Cobián habló de la posible inhabilitación que podría ejecutarse en contra del panista que podría obstruir su función pública durante 12 años.
“No existe la posibilidad de un gobierno sino se tiene una transparencia, y ello es impensable si se tiene una posible inhabilitación a futuro, algo que habla de la probidad de cómo se llevó a cabo la función pública”, refirió Guillermo Deloya al inicio de su participación
Luego, al hablar sobre la problemática que causa la carencia y desabasto del agua, el priista atajó que “el agua potable tiene que ser algo que se solucione porque nos tiene al borde de un conflicto social”. Por tanto, hizo referencia a lo ocurrido el 12 de septiembre de 2013, cuando se votó “para privatizar el servicio de agua, siendo el primer regidor el presidente municipal”, es decir, Eduardo Rivera, quien gobernó la ciudad de 2011 a 2014.
“El servicio no debe ser la propiedad de una empresa. Agua de Puebla –la empresa beneficiada- lucra con la desesperanza de los poblanos”, enfatizó Deloya, quien dijo que su propuesta es “revertir esa perversa concesión”.
Incluso, los señalamientos del priista se extendieron a los últimos años que ha gobernado el PAN a nivel estatal y municipal, al decir que “Puebla ha estados descompuesta en los últimos ocho años, hay mayor criminalidad, y el municipio tiene un estado de indefensión y miedo, pues le han quitado facultades a las presidencias y las juntas auxiliares, cuando hace 13 años era la cuarta ciudad más segura del país”.
De igual forma, otro de los asuntos que fueron señalados por los candidatos es la propuesta de “mil nuevos policías” planteados desde el inicio de su campaña por el abanderado del PAN fueron cuestionados por las candidatas de Morena y Verde Ecologista, Claudia Rivera y Paola Migoya.
Claudia Rivera calificó como “una mentira” la propuesta pues aseguró que “el presupuesto ya marcado y es una ocurrencia” hablar de cierta cantidad de policías; mientras que Paola Migoya tachó de una “ocurrencia” pues dijo que es necesario “ir al epicentro de la inseguridad, trabajar con la cohesión comunitaria y con las causas del delito”.
No obstante, el único cuestionado no fue Eduardo Rivera. También, en varias ocasiones, fue señalada la abanderada de Morena Claudia Rivera, sobre todo cuando abordó el tema de violencia de género.
Si bien Rivera Vivanco propuso la creación de una Secretaría de Género que protegerá no solo a las mujeres sino también a los hombres, fue cuestionada al hablar sobre la alerta de género pues dijo que ella, como “actora política” la activaría, afirmación que le valió la crítica de Paola Migoya, quien dijo que ella no tendría la facultad pues es un trabajo de la Secretaría de Gobernación federal.
De tecnificaciones, inclusiones y contrapesos
A lo largo de las casi dos horas de exposición, y tras presentarse cada uno de los candidatos haciendo alusión a datos personales como que son casados, tienen hijos, licenciaturas y maestrías, o hablan “cuatro idiomas”, el Conversatorio universitario incluyó la presentación de sus propuestas.
De inicio, Eduardo Rivera apostó por ser el “alcalde de la seguridad” con mil nuevos policías, el apoyo que dará al “emprendedurismo” y al turismo, así como que los jóvenes participen una agencia ciudadana por la seguridad pública, misma que será presidida por una mujer.
Luego, Guillermo Deloya quien enlistó sus propuestas de “tecnificación para combatir el crimen”, profesionalizar el servicio público para “capacitar y certificar competencias municipales”, y el “combate sin tregua” que dará contra el crimen organizado.
Claudia Rivera, en su turno, habló sobre el programa Puebla ciudad incluyente, que implica un desarrollo integral de la ciudad través de un programa democrático y participativo, así como la instalación de una policía de proximidad y la creación de la Secretaría de género que tendrá autonomía y “garantizará el empoderamiento” de hombres y mujeres, quienes deberán vivir sin violencia.
Paola Migoya, en cambio, habló sobre el trabajo que hará para “dar bienestar social y paz”, la auditoría que hará del servicio policiaco y la creación de un centro de víctimas; así como la puesta en marcha de un sistema municipal anticorrupción para “generar pesos y contrapesos” apoyados en la tecnología, con la creación de la app Civicus.
Víctor Gabriel Chedraui mencionó su propuesta para hacer 77 centros de desarrollo, un trabajo con transparencia y en coordinación con los ciudadanos, las organizaciones civiles y las instituciones educativas, a quienes calificó de “expertos”, además de la evaluación que harán las cámaras empresariales sobre la contratación que haga la administración municipal ello para no combatir sino “evitar la corrupción”.