Sergio Eduardo Hernández Muñoz, presidente de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco) de la capital, pidió sensibilidad a la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios de Tlaxcala (Coeprist), a fin de que la Ley General de Salud se aplique tanto a establecimientos fijos como ambulantes.
Durante la plática que personal de ese organismo ofreció a socios de este organismo, a efecto de explicarles dicha normatividad y las consecuencias en caso de quebrantar alguna disposición durante el funcionamiento de sus negocios, algunos comerciantes requirieron que la exigencia se extienda a los vendedores de la vía pública.
Una empresaria preguntó a representantes de la Coeprist quién supervisa a los ambulantes, pues operan sin normas y “venden fabulosamente”, mientras tanto, los fijos realizan un esfuerzo para cumplir, no sólo con obligaciones fiscales, sino con la legislación sanitaria.
Reprochó que a los vendedores que se instalan en la vía pública “no les hacen nada, ni les pasa nada, si acaso pagan su derecho de piso… nos perjudican a los establecidos”.
No todos los ambulantes cumplen norma sanitaria
En respuesta, Salvador Sánchez Arellano, funcionario de la Coepris, dijo que los permisos para ambulantes son otorgados por la autoridad municipal y reconoció que, en el caso de quienes ofertan alimentos, “no todos cumplen” con la Ley General de Salud.
Asimismo, justificó que la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios de Tlaxcala interviene con base en las denuncias promovidas por la población. Además, refirió que también debe haber un cambio de cultura por parte de la sociedad para que deje de comer en la vía pública.
Otro socio de la Canaco Tlaxcala cuestionó a Coeprist, ya que pese a una serie de quejas presentada, a la fecha sigue en funciones un antro ubicado en la Rivereña, pero “no ha pasado nada”. Dijo que en ese lugar se han registrado diversas anomalías, incluso un homicidio.
Durante la exposición del personal de ese organismo se abordaron los temas de venta de alcohol y de tabaco. El primero se enfocó básicamente a la oferta de bebidas embriagantes a menores de edad, el cual fue reforzado posteriormente por funcionarios de la Comisión Estatal contra las Adicciones.
La Coepris también puntualizó respecto de las sanciones establecidas en la Ley General de Salud por el expendio de productos adulterados, alterados y contaminados, las cuales derivan en multa, clausura o cárcel. Resaltó la importancia de acatar la Norma Oficial Mexicana NOM 251–SSA1–1994.