La diputada local del PRI, Sandra Aguilar Vega, urgió a las autoridades de los tres niveles de gobierno y a los poderes del Estado a emprender de inmediato una campaña integral de prevención sobre el uso de pirotecnia, tras la explosión registrada el fin de semana pasado en el municipio de Totolac, la cual dejó personas lesionadas, daños materiales y la destrucción parcial de una iglesia en plena festividad religiosa.
La legisladora lamentó los hechos y fue enfática: “Tlaxcala no puede seguir normalizando el peligro ni resignándose a que cada fiesta implique una posible tragedia. No se trata de acabar con nuestras tradiciones, sino de protegerlas sin poner en riesgo a quienes las celebran”.
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En entrevista, Aguilar Vega sostuvo que la cultura de la prevención no puede seguir siendo letra muerta o discurso de ocasión. Por ello, llamó los integrantes de los 60 ayuntamientos de la entidad, a reforzar la vigilancia y garantizar que sólo se realicen quemas autorizadas de pólvora.
La tarde del sábado 15 de junio, en la comunidad de la Trinidad Chiamalpa, de San Juan Totolac, la detonación incontrolada de pirotecnia almacenada sin las condiciones de seguridad provocó un estruendo que cimbró varias calles y derribó parte de la bóveda de una iglesia, al tiempo que dejó un saldo preliminar de al menos tres personas lesionadas, entre ellas un menor de edad.
“Cada vez que ocurre un incidente como el de Totolac, los gobiernos reaccionan, pero no actúan a fondo. ¿Cuántas explosiones más necesitamos para asumir que esto no es folclor, sino riesgo acumulado?”, expresó la diputada priista.
Aguilar Vega también propuso que las personas encargadas de manipular pirotecnia durante festividades sean capacitadas obligatoriamente, y que se fortalezcan los controles de almacenamiento, transporte y detonación en las comunidades. “Esto no es una cacería contra las fiestas patronales. Es un llamado al uso moderado, responsable y regulado”, afirmó.
Ante estas condiciones, la diputada adelantó que propondrá en el Congreso del estado una reforma al marco normativo en materia de manejo de pirotecnia, que delimite claramente quién puede autorizar, quién debe supervisar y cómo se castigará a quienes operen al margen de la norma.
También urgió a las autoridades religiosas y comités de festividades a informar con antelación sus actividades pirotécnicas, respetar las normas existentes y asumir su corresponsabilidad en la seguridad de los eventos que convocan. “No podemos cargar todo a la autoridad y lavarnos las manos. Esta es una corresponsabilidad comunitaria”, advirtió.
Aguilar Vega hizo un llamado a la ciudadanía, especialmente en zonas donde las festividades religiosas son frecuentes, a reflexionar sobre la delgada línea entre celebración y tragedia. “Nuestras tradiciones tienen un valor enorme, pero protegerlas implica cuidarlas. Y eso solo se logra con reglas, vigilancia y conciencia”, sentenció.
