Un terrible dolor de cabeza ha generado en partidos políticos y en actores electorales, el proyecto de redistritación del estado de Tlaxcala propuesto por el Instituto Nacional Electoral (INE), pues varios aspirantes a diputados o a la reelección podrían ver frustrados sus sueños.
Además, las fuerzas electorales constituidas y las que están en vías de hacerlo, tendrían que modificar sus estrategias y cambiar de jugadores, porque los cambios en el mapa comicial de Tlaxcala propuesto, llevaría a una recomposición en cerca de una decena de distritos electorales.
Por ejemplo, de acuerdo con las proyecciones del árbitro electoral federal, los actuales diputados Bladimir Zainos Flores y Miguel Ángel Covarrubias Cervantes tendrían que disputarse su continuidad en el cargo; la inversión y gasto social, cristalizado en una base electoral fuerte, hecho por el oriundo de Texoloc, estaría en riesgo.
Lo anterior porque el “inteligente y minucioso” trabajo realizado por el INE pretende unir, de extremo a extremo de la geografía estatal, en un distrito. Es el caso del proyecto para crear la demarcación 05, que se conformaría por Acuamanala de Miguel Hidalgo, Teolocholco, Tepeyanco, Tetlatlahuca, San Juan Huactzinco, Santa Isabel Xiloxoxtla, San Francisco Tetlanohcan, San Damián Texoloc y San Jerónimo Zacualpan. Zainos es oriundo de Tepeyanco y Covarrubias de Texoloc.
Con situaciones similares, aunque con nombres y actores distintos, hay en molestias, dudas, desesperaciones y terribles dolores de cabezas en más de una decena de distritos electorales, pues tendrían que cambiar de estrategias, aliados y hasta de contendientes.
De ahí que los líderes de partido y sus principales activos ya han empezado a hacer causa común a fin de rebatir y modificar el proyecto de redistritación que a nadie satisfizo, pues en el imaginario existe la percepción de que fue hecho solo en el escritorio y sin atender condiciones sociales, culturales e infraestructura.
Sin embargo, los plazos se acotan. Los partidos tienen menos de 20 días para presentar estudios y argumentos sólidos que impidan a los consejeros aprobar este nuevo mapa electoral, pues de no hacerlo, en los comicios del año 2024 veremos una nueva recomposición comicial.
El proyecto generó dolores de cabeza y muchas dudas, pero si los dirigentes de partidos siguen haciendo su política de representación en redes sociales y aparadores, es muy probable que las inconformidades se queden solo en la eterna estrategia del pataleo.