Líder estatal cenecista se pronuncia por la elección de un nuevo presidente
Con la renuncia de Noé Rodríguez Roldán a la dirigencia priista y a su militancia, crecerá la sospecha de que ayudó al triunfo del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) en la elección del pasado 6 de junio, aseveró Tulio Larios Aguilar, dirigente estatal de la Confederación Nacional Campesina (CNC).
En entrevista con medios de comunicación, refirió que este es un tema que se debe tomar con mucho cuidado, pues la situación que actualmente enfrenta el Partido Revolucionario Institucional (PRI) “es de crisis”, debido a muchas razones, por lo que lamentó que los actores no hayan logrado acuerdos.
El enfrentamiento de Noé Rodríguez con la diputada Blanca Águila Lima es una de las consecuencias, pero también “la pasividad en la que caímos a partir de la derrota de la elección pasada”, expuso.
Acentuó que el PRI cuenta con estatutos claros que establecen la prelación, es decir, para que el siguiente en ocupar de manera interina la dirigencia, sea el secretario general, cargo que actualmente ostenta Óscar Amador.
Sin embargo, afirmó que está en contra de esta disposición, ya que solo permitiría “sacar este momento de crisis”, pues consideró que lo correcto para la vida del partido es convocar a una elección de presidente, en lugar de una ratificación. “Tenemos que apostarle”.
Sostuvo que no aspira a la dirigencia priista, ya que tiene un encargo que cumplir en la CNC, pero que aspira a la unidad de la militancia y a la reconstrucción del PRI.
Reconoció que es indudable la influencia de la fragmentación entre los exgobernadores Mariano González Zarur y Marco Antonio Mena Rodríguez, ya que en la política hay grupos y dentro estos hay intereses, lo que ha llevado a este organismo a esta circunstancia, no solo en la entidad sino a nivel nacional.
“Creo que todos los partidos entraron en crisis porque renunciaron al objetivo principal que es la vocación de servir a la ciudadanía y el del PRI no es la excepción […] lo que nos puede salvar es la unidad y trabajar en torno a ello”, insistió.
Pero admitió que la renuncia de Rodríguez Roldán “da para muchas especulaciones; no quiero meterme a ese tema, cada quien sabrá qué hizo y qué papel jugó en las elecciones, lo cierto es que no se dieron los resultados que teóricamente esperábamos en función de un proceso electoral que hicimos exitoso”, como lo fue la campaña a la gubernatura, “de una gran convocatoria y suma de actores políticos y de la sociedad en general”.
Hay quien asegura que el fracaso comicial tuvo que ver con el efecto Andrés Manuel López Obrador, pero también hay quien dice que fue producto de la falta de trabajo, de liderazgo y de compromiso para lograr el triunfo, anotó.
A la pregunta de si Noé Rodríguez traicionó al PRI al adelantar la posibilidad de sumarse a Morena (partido en el poder estatal y federal), remarcó que si había “la ligera sospecha, creo que se va acrecentando, pero no tengo elementos para asegurar ni una ni otra cosa”.
-¿De la sospecha de que ayudó al triunfo de Morena (en la elección del pasado 6 de junio?.
-Sí, la sospecha se va a acrecentar.
Recalcó que en el PRI no hay unidad, pues de haberla no hubiera perdido las votaciones a la gubernatura y subrayó que el tricolor siempre ha fracasado en los comicios cuando se encuentra dividido, “porque cuando vamos juntos ganamos”.
Añadió que tampoco hay una verdadera convicción o lealtad partidista, ya que la ciudadanía tlaxcalteca ha transitado de un proyecto político a otro, “fuimos tan priistas como perredistas y panistas y hoy tan morenistas […] y no hay continuidad independientemente de quién gobierne, lamentable es que un gobierno llegue y le parezca absurdo lo hecho por otro, pero la sociedad todavía no percibe esa necesidad”.