Este jueves 6 de abril se llevó a cabo en el Centro de Reinserción Social (Cereso) de Tlaxcala capital la representación de la Pasión de Cristo, evento característico de las festividades de Semana Santa, protagonizado por 69 personas privadas de la libertad (PPL), de las cuales 47 son procesados y 22 sentenciados.
La iniciativa nace en el año 1997 cuando un grupo de internos siente inquietud de manifestar su fe a través de estas actividades. Con el apoyo de las autoridades penitenciarias, lograron convertir esta actividad en un medio para la reinserción social que los lleva a la reflexión sobre la vida y las razones por las que se encuentran en el centro de internamiento.
Te puede interesar: Violencias, marginación, pobreza y contaminación, son manifestaciones de la “cultura de la muerte”: obispo
Después de tres años de que estas actividades fueron interrumpidas a causa de la pandemia por Covid–19, este jueves los internos que demostraron buena conducta pudieron representar nuevamente el Vía Crucis frente a familiares y amigos que se dieron cita para presenciar esta muestra de fe e integración, y que contaron con la oportunidad de disfrutar un momento de recreación con ellos.
Además, se contó con la presencia de 15 mujeres del grupo Centinela de la parroquia de San Francisco Papalotla, quienes además de interpretar los papeles de María –madre de Jesús–, María Magdalena, Verónica que con su velo enjugó el rostro de Cristo, y otras, aprovecharon la oportunidad para levantar rosarios con algunos de los internos que participaron también de esta interpretación.
Por supuesto, para llevar a cabo el proyecto de Vía Crucis Penitenciario, desde 1997 fue necesario contar con el apoyo de alguna comunidad del estado de Tlaxcala; y recibieron la respuesta incondicional y favorable del municipio de Santo Toribio Xicohtzinco.
Es así que este año los internos dieron muestra de su determinación para interpretar sus papeles al recrear los eventos de la crucifixión del hijo de dios, y soportar el abrazador sol de la tarde sobre sus cabezas, el peso de las cruces de madera que cargaron alrededor del patio sin descanso y los azotes que “centuriones” les proporcionaban con cuerdas trenzadas.
Resulta evidente que tales golpes no pasaron inadvertidos para sus cuerpos, en cuyas espaldas fue posible ver, a los pocos minutos, el enrojecimiento propio de los impactos tanto del sol como de las cuerdas.
A pesar de ello, los internos continuaron su camino y guardaron con fidelidad los papeles para los que se prepararon con semanas de antelación y que personificaron con escenografía, guion y vestuarios adecuados.
La interpretación que llevaron a cabo, aunque no exenta de detalles perfeccionables, fue muestra del previo esfuerzo para hacer un trabajo no solo organizado, sino profundo en actuación y elementos que otorgaron fuerza y sensibilidad a las tradiciones de Semana Santa.
Para los participantes, esto fue un recordatorio de fe y agradecimiento por contar “con un día más de vida” y la oportunidad de enfrentar el internamiento, que algunos calificaron como “su propio Vía Crucis”.
De igual manera, compartieron que agradecían a dios por haberles dado las fuerzas para formar parte de un proyecto tan importante.
Más tarde, el hombre que interpretó el papel de Jesús, cuya identidad se solicitó que fuera reservada, expresó que para él se trató de algo sagrado que lo llenaba de tranquilidad al poder representar a su Salvador, evento que lo hacía feliz.
Añadió que, a pesar de su situación, se mantenía firme en su fe y devoción. Y confiaba en que, cuando pudiera salir, contaría aún con el respaldo de dios para salir adelante.
“Yo siempre he dicho: si dios conmigo, quién contra mí”.
Señaló también que para interpretar su papel requirió invertir meses de trabajo físico, psicológico y espiritual; y compartió que incluso con lo agotador que era cargar con la cruz y tolerar los azotes, no se sentía cansado, sino en paz.
Finalmente, lamentó que su familia no hubiera asistido para acompañarlo y reiteró que sostenía la esperanza de contar con la compañía de dios en ese proceso.