Claudia Flores Cervantes, presidenta de la Asociación Jóvenes Transformando la Nación e integrante de la Central Campesina Independiente (CCI), demandó al gobierno “oportunidades productivas, no sociales”, pues el sector juvenil demanda financiamiento, sin embargo se ha topado con “puertas cerradas” y con tasas de interés elevadas.
En contraste –expuso-, el presupuesto para el Programa Jóvenes Construyendo el Futuro es alto, lo vemos con preocupación porque hay personas que buscan emprender, pero se encuentran con diversos problemas.
En rueda de prensa, dijo que en la administración federal anterior “se podía trabajar con Financiera Nacional de Desarrollo, ahora es preocupante que no tenga mucho presupuesto y que las tasas de interés estén muy elevadas”.
La intención –subrayó- no es que nos den dinero, sino que nos apoyen para generar nuestros propios ingresos en el campo, a través de micro empresas; hay quienes se dedican a actividades diversas, como la elaboración de arreglos para fiestas, por lo que actualmente son afectados por la pandemia de Covid-19, sin tener un respaldo para paliarla.
A nivel local, el año en curso se presentaron ante la Secretaría de Fomento Agropecuario (Sefoa) algunos proyectos para jóvenes, pero varios quedaron pendientes para 2021.
Anotó que también le inquieta el presupuesto que proyectan asignar a esa dependencia estatal para el año próximo, ya que solo se da preferencia a aquellas propuestas agroindustriales, aunque existe la posibilidad de que sean rechazadas, sobre todo en las que se requiere de maquinaría. En 2018 cinco solicitudes en materia ganadera y de maquinara no pudieron ser sujetas de apoyo, añadió.
Por lo anterior solicitó a la Federación y al estado que desarrollen políticas públicas adecuadas y mejoren los programas que están enfocados al sector juvenil, “para que no solo sean asistencialistas, sino productivos. Para nosotros es difícil recurrir a los bancos”.