Elías Dávila Espinoza, representante del albergue para migrantes “La Sagrada Familia”, consideró que los gobiernos de Honduras, Guatemala, El Salvador, México y Estados Unidos deben tomar acuerdos hacia una migración más ordenada.
Ante la proximidad de la llamada “Caravana Madre” que partirá de Centroamérica, señaló que es poco probable que Tlaxcala sea un punto del trayecto de este conjunto, el cual buscará ciudades más grandes como Oaxaca, Puebla y la propia Ciudad de México.
En el caso de Apizaco –indicó-, no habría capacidad para alojar a toda esa cantidad de personas, pues la experiencia en esta materia es la de recibir a grupos menores que salen de sus naciones sin dinero o con limitaciones.
Expuso que la “Caravana Madre” ha llamado la atención de la sociedad mexicana y del gobierno, debido a la cifra de aproximadamente 20 mil migrantes que pudiera ingresar a territorio mexicano; a diferencia de esas camarillas pequeñas que pasan y “no se ven” de la misma forma porque no sobresalen en número.
Esta multitud que se aproxima, al igual que la que le ha antecedido, tratará de llegar a Estados Unidos mediante la travesía que realizará por México de una manera más organizada, pues se comenta que algunos de sus integrantes son financiados, dijo.
Esas personas –comentó- viajarán en autobuses, se establecerán en lugares fijos y “batallarán menos” porque ya tienen una ruta a seguir bien definida; incluso, para cruzar la frontera y solicitar su visa seguirán procesos regulados.
Lo ideal sería que los gobiernos de Honduras, Guatemala, El Salvador, México y Estados Unidos “tengan una reunión para una que se vea una migración más ordenada, desde esos países centroamericanos”, insistió.
Sobre todo –enfatizó- porque en el caso de este grupo grande, conformado por mujeres, niños, jóvenes y adultos, “es como una ciudad en marcha y para darles de comer en un momento determinado, cualquier recurso no alcanza”.
El problema de fondo es que se trata de una crisis humanitaria en la que los gobiernos deben entrar de lleno a atenderla y resolverla. “Sabemos de antemano que va a ser difícil que la ‘caravana madre’ entre a Estados Unidos, muchos se van a quedar aquí, con visa temporal, ¿pero de qué van a vivir?”.
Resaltó esta situación al reparar en que esas personas tendrían que buscar un trabajo. “La migración –acentuó- es una realidad; no hay que verlos como enemigos”.