“Me voy muy contento al retiro, ya cumplí con mi ciclo, ya llevo muchos años luchando, ya voy a jubilarme… entregué el bastón de mando y ahora vamos a entregar la banda presidencial” en dos meses y medio, aseveró el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador.
En lo que podría haber sido su última visita a la entidad tlaxcalteca en calidad de titular del Poder Ejecutivo federal, remarcó que está a favor de la no reelección, pues nadie es indispensable “para garantizar que las cosas sigan bien en México”, sino es el propio pueblo.
Te puede interesar: La revolución de las consciencias se logra con educación: Lorena Cuéllar
Desde la Plaza del Huehue, en el municipio de Yauhquemehcan, el mandatario reiteró su satisfacción por los resultados electorales del pasado 2 de julio, los cuales dieron en triunfo a su correligionaria Claudia Sheinbaum Pardo, quien le acompañó en esta gira de trabajo por el centro del país.
Ambos, morenistas arribaron la mañana de este domingo al estado para encabezar la Evaluación de Programas y Proyectos de Educación y Deportivos, a cargo de la titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Leticia Ramírez, así como de funcionarios de esa dependencia.
Repasó las críticas hacia sus adversarios políticos de quienes remarcó que solo han buscado el poder sin el pueblo y que quisieran que prevalezca la oligarquía, pero que eso no es la verdadera democracia, y recalcó que en México se ha avanzado en “la revolución de las consciencias”, tema central de este acto.
Al subrayar que en las pasadas votaciones quedó de manifiesto que el pueblo es el que manda, puntualizó que “lo mejor que pudo pasarle a los mexicanos” y que es “una benidición”, es la elección de Claudia Sheinbaum como presidenta de México.
Enfatizó que en 500 años, por vez primera una mujer “extraordinaria” gobernará a este país, para darle continuidad a la Cuarta Transformación, por tanto, todos los programas de bienestar están asegurados.
También puedes leer: La Cuarta Transformación debe continuar
Reiteró que la próxima presidenta es una persona de mucho talento y confió en que va a contar “con el apoyo de todo el pueblo”.
Insistió en que no hay que tener mucho afecto ni al dinero ni al poder, “porque eso no es la felicidad”, sino el “estar bien con uno mismo, con nuestra conciencia y con el prójimo, esa es la verdadera felicidad”.
Tras la recepción por parte de la gobernadora Lorena Cuéllar Cisneros, López Obrador reiteró el afecto que tiene al estado de Tlaxcala, y los “buenos recuerdos” que guarda de este lugar.
“Decirles que vamos a seguir, en el tiempo que nos queda, trabajando en beneficio del pueblo. Yo les felicito, tienen a una gobernadora extraordinaria, de primera”. Asimismo, se refirió a otros funcionarios de su sexenio que son originarios de esta entidad, entre ellos al exgobernador priista, Marco Antonio Mena Rodríguez, director de la Lotería Nacional.
También nombró, al exgobernador Alfonso Sánchez Anaya; a Ana Lilia Rivera Rivera, senadora de la República reelecta, y al también senador ratificado, José Antonio Álvarez Lima, a quien se refirió nuevamente como ” a alguien que quiero mucho, que lo estimo”.
En lo que sería una especie de despedida a Tlaxcala, el presidente dijo que cada vez habrá más tlaxcaltecas en las direcciones, pues “ustedes son vanguardia, es decir, van adelante del movimiento de transformación”.