Liliana Becerril Rojas reconoció que quiere ser gobernadora de Tlaxcala por el poder y el dinero, pero a diferencia del resto de contendientes a la misma posición, la candidata del Partido Encuentro Solidario (PES) aclaró que el poder lo necesita para transformar la vida de los tlaxcaltecas y el dinero para construir la infraestructura que requiere el estado y para lograr las metas de su proyecto de gobierno.
Así lo explicó ante la estructura del PES que acudió al llamado de la dirigencia estatal para apoyar el arranque formal de la campaña de su candidata a la titularidad del Poder Ejecutivo local, la mañana de este lunes en la plaza de toros Jorge “El Rachero” Aguilar en la capital del estado, evento que por la pandemia de Covid-19 se realizó con un número limitado de personas, a quienes el cubrebocas que portaban no les impidió echar porras y vitorear a la aspirante.
Ante los dirigentes nacional y estatal, Hugo Erick Flores Cervantes y Alejandro Martínez Hernández, respectivamente, así como de candidatos a diputados federales y locales, Liliana Becerril criticó no se ha sabido administrar la riqueza que posee la entidad. Ofreció un gobierno de puertas abiertas y convocó a un pacto ciudadano de gran alcance.
Un pacto, abundó, por la por la defensa de la vida desde el momento que se concibe; por la familia, y los valores que de ella emanan; por la transparencia y combate con cárcel a la corrupción; por las energías limpias y por entornos ecológicos sustentables; por un campo tecnificado, diversificado y financiado.
También, un pacto por la inversión privada en la industria turística de gran nivel; por la modernización digital al 100 por ciento del gobierno y sus servicios; por el que nuestros universitarios se capaciten en emprendedurismo y negocios; en el que los ciudadanos sean atendidos directamente por la gobernadora y el gabinete.
“No más obras de beneficencia sin oficio ni propósito, no más apoyos económicos clientelares o electoreros, no más promesas que se las lleve el viento, no más propuestas generadas por las mentes que se inventan nuestras necesidades. En el PES, queremos la paz y la reconciliación para Tlaxcala, para el país. Ya estuvo bueno que nos separen entre buenos y malos como extremos de polarización”.
Previamente, la candidata dijo que quiere ser gobernadora “por el poder y el dinero”.
“Por el poder de transformar la vida de todos los tlaxcaltecas en cada acción, en cada decisión y en cada pensamiento, porque el poder debe ser de los tlaxcaltecas, no de los políticos de siempre que cada elección los vemos en distintas boletas electorales y en distintos partidos políticos. Ellos, solamente esperan ver cómo el poder les sirve a ellos y a su círculo de amigos y patrocinadores (dinero)”.
Pero ojo, abundó, también quiero ser gobernadora por el dinero, porque con el dinero, facilitaremos la infraestructura que necesitamos y alcancemos las metas que nos hemos propuesto en la vida. Para que trabajemos en lo que nos gusta y no en lo que se puede o en lo que hay, que ganemos nuestro propio dinero para beneficio de nuestras familias.
El dinero del gobierno, recordó, proviene de los impuestos que paga la ciudadanía a la entidad encargada para ello, entonces, “es lógico que quiera ser gobernadora para acceder a ese dinero y poder crear la infraestructura de primer nivel que nos merecemos y que hasta ahora, nadie nos ha podido dar”.