Con el lema “la inclusión no es un acto de caridad, es una expresión de justicia”, integrantes de los poderes Legislativo y Ejecutivo, así como activistas, reconocieron la falta de políticas públicas que existen para garantizar una fuente laboral, en condiciones de igualdad y equidad, para las personas discapacitadas en Tlaxcala.
En el foro denominado “El trabajo no tiene discapacidad”, en conmemoración del mes del trabajo digno 2025, que este jueves se realizó en el Congreso local, el Secretario de Trabajo y Competitividad del gobierno estatal, José Noé Altamirano Islas y la diputada de Morena, Gabriela Hernández Islas, reconocieron estas condiciones al tiempo que aseguraron que impulsarán las acciones para terminar con esas brechas.
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En el foro, en el que reconocieron que en Tlaxcala persiste una deuda histórica con las personas con discapacidad, a quienes se les sigue negando el acceso pleno a una vida laboral digna, equitativa y libre de barreras estructurales y sociales, el foro se convirtió en un espacio de reflexión y denuncia sobre las condiciones laborales de este sector poblacional, largamente marginado de las políticas públicas y excluido del discurso del desarrollo.
En este contexto, el secretario de Trabajo y Competitividad del gobierno estatal, José Noé Altamirano Islas reconoció que las brechas son amplias y que aún falta mucho por hacer para garantizar igualdad de oportunidades.
“El talento, el esfuerzo y las aspiraciones de las personas no pueden seguir encontrando barreras en el mundo del trabajo. La inclusión laboral no debe ser un acto de buena fe o filantropía, sino un derecho humano”, aseveró.
Altamirano Islas aseguró que el gobierno estatal se aboca para que “el trabajo digno llegue a todas las zonas, sin importar su condición física, sensorial, material o social”, y destacó el impulso al distintivo de empresa incluyente como una de las herramientas para visibilizar y avanzar en esta agenda pendiente.
Pero más allá de las acciones institucionales, el funcionario puso énfasis en el aprendizaje necesario a partir del testimonio y la experiencia de quienes enfrentan diariamente las barreras de la exclusión. “Hoy tendremos el privilegio de escuchar voces reales, de conocer historias, y también de reflexionar sobre lo que aún nos falta por hacer”, subrayó.
Por su parte, la diputada de Morena, Gabriela Hernández Islas, promotora del foro, fue contundente al señalar que un grupo que ha estado en los márgenes sociales siempre ha sido el de personas con discapacidad”.
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Desde su propia vivencia, destacó que el derecho al trabajo se vincula estrechamente con otros derechos fundamentales, como el acceso a la salud, la educación y la vivienda. “Tener autonomía es algo muy difícil para nosotros; encontrar un trabajo que se adapte a nuestras necesidades y no al revés, es una tarea titánica”, dijo.
Durante su intervención, Hernández Islas también llamó a la responsabilidad compartida: “El Poder Ejecutivo no puede hacerlo solo. ¿Qué hacemos nosotros para mejorar, para incluir? También allí es donde tenemos que cambiar”.
El foro contó con la participación de personas con diversas discapacidades –auditiva, visual, motriz e intelectual–, cuyas intervenciones ayudaron a dimensionar la complejidad y urgencia del tema. La diputada reconoció la necesidad de reformas legislativas que establezcan cuotas de inclusión específicas para asegurar el acceso al empleo formal.
