En el primer año de la presidencia que encabeza Claudia Sheinbaum Pardo, el homicidio doloso en México presentó una baja de 32 por ciento, es decir, 27 homicidios dolosos menos diarios, al pasar de un promedio de 86.9 casos diarios en septiembre de 2024 a 59.5 en septiembre de 2025, informó la titular del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (Sesnsp), Marcela Figueroa Franco.
Durante la conferencia mañanera que encabezó este martes la presidenta de México, junto a integrantes del Gabinete de Seguridad, la funcionaria federal indicó que el mes de septiembre de este año es el más bajo desde 2015, como resultado del impacto de la Estrategia Nacional de Seguridad.
De acuerdo con el reporte del Sesnsp, los 10 estados que menos homicidios dolosos registraron en septiembre pasado fueron: Zacatecas (cuatro), Yucatán (cinco), Durango (ocho), Coahuila (ocho), Campeche (nueve), Querétaro (11), Tlaxcala (13), San Luis Potosí (14), Aguascalientes (14) y Chiapas (15).
Respecto a septiembre de 2024, 23 entidades federativas mostraron un descenso en el promedio diario de este delito, entre las cuales se encuentra Tlaxcala, con una disminución de 19 por ciento.
Y en el acumulado de 2025, correspondiente al periodo de enero a septiembre, los seis estados con menor incidencia de homicidio doloso fueron: Tlaxcala (95 casos), Campeche (93), Aguascalientes (88), Coahuila (60), Durango (48) y Yucatán (23).
En contraste, siete entidades concentraron el 51 por ciento del total de casos de homicidio doloso de los primeros nueve meses de este 2025: Guanajuato (2 mil 084), Chihuahua (mil 371), Baja California (mil 344), Sinaloa (mil 302), Estado de México (mil 208), Guerrero (mil 069) y Michoacán (mil 024).
En Tlaxcala, la gobernadora Lorena Cuéllar Cisneros reconoce la Estrategia Nacional de Seguridad y sus resultados, por lo que la estrategia estatal está alienada con los ejes de acción del gobierno federal, con acciones coordinadas con los otros niveles de gobierno y los poderes, para dar atención a las causas de la violencia, consolidar las corporaciones de seguridad y fortalecer el trabajo de inteligencia e investigación.
Gracia a ello y a una inversión inédita de más de 8 mil millones de pesos para abatir 20 años de rezago en infraestructura, operatividad y equipamiento de las fuerzas de seguridad, los delitos de alto impacto han mostrado una tendencia a la baja en los últimos años.


