Pese a los avances científicos, médicos y tecnológicos, los contextos sociales y culturales, incluido el machismo, impiden la correcta prevención del cáncer de mamá, de ahí que es necesario cerrar filas entre los poderes del Estado para establecer acciones que permitan destruir esos diques para abatir ese padecimiento que es la primera causa de muerte de mujeres por cáncer en México.
Legisladoras, funcionarias estatales y activistas reconocieron que el cáncer de mama es una enfermedad que puede ser vencida en su atención a través de una detección temprana, pero existen todavía condiciones que impiden a la mujer acceder a esquemas de salud para atender este problema de salud.
En el marco del taller Aprende a explorarte, que se realizó este miércoles en el marco del Día Internacional de la lucha contra el cáncer, la directora de Instituto Estatal de la Mujer (IEM), Margarita Cisneros Tzoni reconoció que, pese a los avances en todos los ámbitos y las políticas públicas puestas en marcha para prevenir este tipo de cáncer, la sociedad “está fallando”, porque persisten actitudes machistas que prohíben al sector femenino a ser atendidas en materia de salud.
“Es aquí en donde tenemos que cerrar filas los poderes del estado, para ver cuáles son esas causas fundamentales que están fallando en la sociedad, porque no todo tiene que ver con las instituciones, sino con la complicación estructural y cultural en la sociedad, la muerte también tiene un rostro en los roles de género.
Abundo: “La prevención no solo es ver que nosotros conozcamos y nos exploremos, sino que tiene que ver también con la concientización de los hombres, para poder sensibilizar y atender esta situación cultural. Es triste cuando las mujeres dicen no me da permiso mi esposo, es que tengo que ir a escondidas o bien no llegan a las caravanas de la salud, porque primero hay que convencer al esposo para que les diera permiso. Eso significa el nivel de la tarea institucional que tenemos”, para prevenir o detectar de manera oportuna este padecimiento.
Esta realidad y preocupación fue secundada por la diputada petista Lorena Ruiz García, quien reconoció que por la opresión que ejercen los hombres, impiden a las mujeres que sean atendidas de manera pronta y temprana de este y otros padecimientos, de ahí que el índice de muertes por cáncer de mama se incremente.
“Las mujeres podemos prevenir que esta enfermedad nos arrebate la vida. Muchas de las muertes de las mujeres asociadas a esta enfermedad están directamente ligadas a estrategias ligadas a estereotipos de género, a estos mandatos sociales que muchas veces nos impiden acudir a que un médico nos explore y esto, debe terminar. No podemos poner en riesgo nuestra vida por este tipo de construcciones sociales, creencias y temores, porque nuestra salud es primero”, espetó la legisladora.
Por ello, hicieron un llamado para abatir este tipo de conductas y estereotipos, pues reiteraron que el índice de muertes por cáncer de mama puede ser abatido, siempre y cuando haya una detección oportuna de la enfermedad y su debida atención.