Durante su gestión como rector de la Universidad Autónoma de Tlaxcala (UAT), Luis Armando González Placencia aplicará un mayor control en el ejercicio del presupuesto destinado al gasto que realizan algunas facultades para la organización de eventos o en el pago de honorarios de conferencistas, así como en los medios de transporte que utilicen profesores para acudir a actividades fuera del estado.
Dicha medidas forman parte del plan de austeridad que anunció el rector en el evento de presentación del Informe de Actividades 2018-2019, celebrado el pasado jueves en el Centro Cultural Universitario (CCU).
En rueda de prensa posterior a ese acto, González Placencia indicó que todavía no tiene una proyección del monto de recursos que se ahorrará en la máxima casa de estudios de la entidad con la puesta en marcha de su plan de austeridad, pues consideró que será hasta el próximo año cuando ya tenga una cantidad exacta.
Aclaró que las medidas del plan de austeridad no implica un recorte de recursos en sí, sino en un control más estricto del gasto que se genera por la organización de eventos especiales o en algunas facultades de la universidad, “como gasolina, viajes, honorarios que se suelen pagar a conferencistas, vamos a hacer que los eventos no nos cuesten o nos cuesten lo menos posible”, apuntó.
“Vamos a ver en qué otras cuestiones es posible recortar los gastos, pero sobre todo el tema es ordenar, que los profesores o profesoras regresen el dinero que no se gastaron por concepto de viáticos, que traten de economizar en el medio de transporte que van a utilizar, y mucho control y rigor en la rendición de cuentas”.
No obstante, advirtió que los ahorros que se generen por estas medidas no serán en mayor cantidad, pues “el presupuesto apenas alcanza. Tampoco es que vayamos a ser mucho más austeros de lo que la universidad ya es, pero si estamos revisando algunos gastos que podrían recortarse”.
Por otro lado, González Placencia consideró que las universidades que creará el gobierno de Andrés Manuel López Obrador en los municipios de Xaltocan y Cuapiaxtla no representan un riesgo para la UAT, pues tendrán “una misión muy particular, que es complementaria con la nuestra”.
Si bien reconoció que cuando se anunció la apertura de esas dos nuevas instituciones de educación superior, le provocó un sentimiento de preocupación, ya invitó a la coordinadora de esos proyectos del gobierno federal, Raquel Sosa, “para que platiquemos y veamos de qué manera nuestra universidad puede colaborar con las dos nuevas universidades”.