Sin contratiempos, pero con la evidente concentración de poder que ejercerá la mayoría de Morena y aliados, que se vio en la integración de la Mesa Directiva, este jueves rindieron protesta al cargo de diputados los 25 integrantes de la LXV Legislatura local, quienes a partir del primer minuto de este 30 de agosto iniciarán sus funciones.
Aunque todavía estaba pendiente la resolución de tres juicios en torno a la integración del Poder Legislativo local en la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), todos rindieron protesta al cargo porque casi tres horas después los magistrados desecharon las demandas en torno a la elección del distrito 15 y la asignación de las diputaciones de representación proporcional.
El ritual de unción se volvió a cumplir, como cada tres años, solo que ahora la reelección permitió la continuidad de 10 personas que venían ejerciendo el cargo y también significó el regreso de “viejos conocidos” del recinto legislativo, que retornan “a servir al pueblo”. También se dio el arribo de nuevos rostros, esos que añoran cambiar las cosas del parlamento.
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Tanto en unos como en otros y en los demás, prevaleció la camaradería y los buenos modales; no podría ser de otra manera, era su día y sobre ellos estaban los ojos de sus familiares, de sus esposas, esposos, hijos, amigos y hasta del novio. Aunque no faltaron los sobrados y soberbios.
Desde mucho antes de las 5 de la tarde de este jueves, cada uno de los 25 integrantes de la nueva Legislatura llegó –acompañado de su séquito– al Palacio Legislativo. “Ojalá así lleguen siempre a trabajar”, expresó uno de los añejos trabajadores del Congreso del estado.
Muchos de ellos dejaron ver que echaron mano de sus ahorros y otros de la cartera o del préstamo, para ataviarse exclusivamente para la ocasión. Trajes nuevos, vestidos de marca; ajuareados todos, que a la mayoría les hizo parecer otras las personas las que llegaban al cargo y no aquellos humildes candidatos que se ensuciaban los zapatos clamando llegar al Congreso local. Los tiempos y momentos son otros, para ellos llegó la hora de “pizcar”.
La banda de música, los teponaxtles, las porras y los seguidores flanquearon el arribo de los noveles y no tan noveles congresistas. La morenista Ana Bertha Mastranzo Corona fue la más coreada.
En suma, el Palacio Legislativo y sus alrededores estaban hechos una romería fifí.
Uno a uno fue guiado hasta el salón de plenos y ahí fueron escogiendo su curul. Algunos por bancadas, otros por estrategia y otros más porque fue el lugar que les dejaron.
Ahí estaban algunos enseñoreados, con grandes ínfulas, como si el Congreso no los mereciera, como varios de los diputados reeleccionistas.
Orondo estaba el neomorenista Ever Alejandro Campech Avelar, del distrito 01 de Calpulalpan; le seguía el ecologista Jaciel González Herrera, del 03 de Tetla; Lorena Ruiz García, del distrito 04 de Apizaco; Vicente Morales Pérez, del distrito 06 de Ixtacuixtla;
Maribel León Cruz, de la demarcación 09 de Chiautempan; Miguel Ángel Caballero Yonca, del distrito 10 de Huamantla; Bladimir Zainos Flores, del distrito 12 de Teolocholco y Brenda Cecilia Villantes Rodríguez, del distrito 14 de Papalotla.
También las diputadas de representación proporcional que repiten en el cargo, como la priista Blanca Águila Lima y la de Fuerza por México Tlaxcala, Reyna Flor Báez Lozano.
De la misma manera, llegaron otros exdiputados que regresaron a este cargo, ahora sí a legislar, como el exgobernador Héctor Ortiz Ortiz del PAC; el líder del PT, Silvano Garay Ulloa; la perredista Laura Yamili Flores Lozano y la morenista María Ana Bertha Mastranzo Corona, quien ganó no solo su elección en el distrito 15 de San Pablo del Monte, sino un largo litigio al sistema.
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De los noveles estuvieron la diputada del distrito 02 de Tlaxco, Gabriela Hernández Islas; también lo hizo María Aurora Villeda Temoltzin, legisladora del distrito 05 de Panotla; también Madaí Pérez Carrillo, de la demarcación 07 de Tlaxcala y David Martínez del Razo, del distrito 08 de Contla, lo mismo que Anel Martínez Pérez, del distrito 11 de Huamantla y Emilio de la Peña Aponte del distrito 13 de Zacatelco.
También lo hicieron los plurinominales Maribel Cervantes Hernández del PT; la panista Miriam Martínez Sánchez; Soraya Noemí Bocardo Phillips del PVEM, Sandra Aguilar de Movimiento Ciudadano y de Nueva Alianza Tlaxcala, Engracia Morales Delgado.
A la plenaria arribó de la titular del Ejecutivo local, Lorena Cuéllar Cisneros y el secretario de Gobierno, Luis Antonio Ramírez. Antes ya había llegado la presidenta del Poder Judicial, Anel Bañuelos Meneses.
Llegado el momento y tras el acto cívico, la mayoría hizo valer su voluntad y el agandalle que tanto se advertía, al imponer al reeleccionista y morenista Miguel Ángel Caballero Yonca como presidente de la Mesa Directiva; el mismo talante se advierte en la integración del resto de dicho órgano que encabezará los trabajos parlamentarios del primer periodo ordinario de sesiones que inicia este viernes 30 de agosto.
La mayoría y los reeleccionistas se quedaron con las principales posiciones; ahí está el caso de la diputada de Morena, Lorena Ruiz García en la vicepresidencia; la petista Brenda Cecilia Villantes Rodríguez, en la primera secretaría; el morenista Emilio de la Peña Aponte, en la segunda secretaría; la petista Maribel Cervantes Hernández, en la primera pro secretaría y la perredista Laura Yamili Flores Lozano, en la segunda pro secretaría.
Sus homólogos, con el brazo extendido, hicieron lo propio del ceremonial de unción, mientras las luces de los flashes de las cámaras fotográficas iluminaron la sala de plenos.
Minutos más tarde, cada legislador, tras múltiples fotos, festejó con los suyos; abrazos y buenos deseos fueron la constante en el ritual que no ha cambiado en al menos las 10 últimas legislaturas, de las cuales nos ha tocado informar… lo dicho, “es la misma gata, pero revolcada”.