El recién nombrado delegado del Centro INAH–Puebla, Manuel Villarruel Vázquez, advirtió que interpondrá una denuncia legal en las instancias correspondientes, así como en el órgano interno de control del organismo, de encontrar corrupción en el manejo del programa de reconstrucción de 621 inmuebles históricos en el estado, según declaró en una entrevista virtual a La Jornada de Oriente, en el que aseguró que está muy interesado en atender cualquier posible esbozo de señalamiento de corrupción o deshonestidad en el instituto.
“Es algo que el director general del INAH nos ha señalado y en el que ha hecho mucho hincapié, no sólo para Puebla sino para todas las áreas de la institución en el país”, enfatizó, al afirmar que también se están cumpliendo a las recomendaciones señaladas por la presidencia de la República y la Secretaría de la Cultura.
Esto surge luego que la semana pasada, esta casa editorial diera a conocer las denuncias que realizó el titular saliente del organismo, el arquitecto Ambrosio Guzmán Álvarez sobre presuntos actos de corrupción al interior del organismo por parte de los peritos responsables de la reconstrucción de inmuebles históricos.
Posteriormente, esa misma postura fue avalada por el director General del INAH, Diego Prieto, en un audio que fue entregado a esta casa editorial en el que afirma que el perito Sergio Vergara es quien encabeza la “mancha” de la presunta corrupción en Puebla.
En entrevista, Villarruel Vázquez dijo que tiene la obligación de dar seguimiento a los señalamientos y las denuncias para acompañar a cada caso en lo necesario a fin de dirimir responsabilidades legales en contra de cualquier funcionario público.
A escasos tres días que asumió el cargo, comentó que no ha recibido información precisa ni consolidada que haga alusión a alguna irregularidad en el manejo del programa de reconstrucción del sismo del pasado 19 de septiembre de 2017 en la entidad; sin embargo, el delegado del INAH aclaró que no tiene ninguna intención de ocultar nada.
Aclaró que las denuncias deberán ser tramitadas ante las instituciones correspondientes, mientras que el INAH tiene un área jurisdiccional que se encarga de los asuntos.
El maestro en Restauración y Sitios de Monumentos agregó que en el instituto existen los órganos internos de control para indagar sobre posibles actos de corrupción.
No obstante, el especialista exhortó que si algún ciudadano tiene pruebas contra personal del organismo sobre negligencias o corrupción deberán presentar las denuncias ante las instancias correspondientes.
“Como es mi obligación daré acompañamiento a los procesos, vamos a trabajar con honestidad, esmero y esfuerzo”, afirmó.
Finalmente, recordó que el día que asumió el cargo en el auditorio del Museo Regional de Antropología de Puebla, dijo que llega a este estado para trabajar y aprovechar el esfuerzo de sus compañeros del INAH, quienes reconoció han demostrado fidelidad en la conservación del patrimonio.