El recién nombrado titular del Centro en Puebla del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Manuel Villarruel Vázquez, señaló que, de los 621 inmuebles afectados por el sismo del 19 de septiembre de 2017 en el estado, 52 por ciento de ellos han sido restaurados en su totalidad, mientras que un 32 por ciento está en proceso y el resto, el 16 por ciento, está en estudio.
Durante una entrevista virtual con La Jornada de Oriente, quien fuera, desde 2017, director de Licencias e Inspecciones de la Coordinación Nacional de Monumentos Históricos del INAH, sostuvo que del “gran universo” de inmuebles dañados en el estado, 325 ya son “obras terminadas”, 196 en proceso y 100 más en un “proceso inicial”.
Acompañado por Salvador Camarena, coordinador nacional del Programa Sismos del propio INAH, el arquitecto y restaurador Manuel Villarruel dijo que existe otro grupo, denominado “paquete”, de bienes muebles que “tienen un avance significativo”. Incluso, indicó que hay un “avance del 95 por ciento” para otro tanto de proyectos que están por iniciar la fase de licitación y contratación.
Indicó que otros expedientes en proceso de análisis son los que deben enfocarse para trabajar. “El INAH trabaja no solo con el objeto de bienes muebles e inmuebles, sino que todo el gran proceso sea conforme la normatividad y la materia de obras públicas, además de transparente”, confió.
Villarruel Vázquez acotó que en muchos de los proyectos ha sido necesario implementar mecanismos de organización, diseño y expedientes para que se cumpla con los criterios de normatividad, para que las obra son sólo sean eficientes y eficaces en materia de restauración, sino que cumplan además con lineamientos de transparencia.
Continuó que los diagnósticos para cada caso son específicos y minuciosos, por lo que no se puede generalizar. “Es como un estudio médico que se hace para cada uno de los pacientes que permite desarrollar técnicas de intervención específicas”.
Mencionó que hay otros proyectos que están por concluir, como es el caso del templo de san Pablo de los Frailes, el templo del antiguo Hospital de Belén, el templo de san Ángel Custodio, y el templo conventual de san Jerónimo, todos ubicados en el municipio de Puebla, a la par del centro parroquial de santa María de la Natividad, en Tochtepec.
El Centro INAH se dividió en 10 regiones para atender los daños causados en el 19S
Por su parte, Salvador Camarena, coordinador nacional del Programa Sismos del INAH, dijo que el compromiso del instituto es reconstruir esos 621 inmuebles registrados situados en 120 municipios de la entidad, de los cuales 112 si tuvieron la declaratoria del Fondo de Desastres Naturales (Fonden).
Señaló que, al formar parte del Programa Nacional de Reconstrucción, que incluye a cuatro secretarias, el INAH tiene singularidades y apoyos distintos para su labor. “El resorte del INAH procede del financiamiento del seguro y del Fonden, además de la participación de organismos internacionales como la Unesco o de apoyos internacionales, a la par de la empatía de las propias comunidades”, dijo el funcionario federal.
Narró que, tras el sismo del 19 de septiembre, el primer desafío fue el hacer el censo de los daños. Puebla estaba muy activo, tuvo apoyo de los centros INAH Tabasco y Zacatecas… El centro INAH Puebla logró en un mes registrar 436 inmuebles al Fonden, fue de los estados que obtuvo la mayor cantidad de registros de las 11 entidades dañadas”, relató.
Camarena completó que Puebla logró tener mil 775 millones de pesos del Fonden para restaurar los 436 inmuebles registrados, a la par que del programa Apuntalamientos inmediatos, conocido como Api, se aplicaron otros 30 millones de pesos para restaurar aproximadamente 120 inmuebles.
El coordinador nacional del Programa Sismos indicó que para llegar a la cifra de 621 inmuebles registrados tuvieron que pasar seis meses más y que fue en marzo de 2018 cuando ya se tenía con certidumbre el dato.
Lamentó que al detenerse el Fonden, pues se define que será un programa complementario y se tiene que activarse el seguro del INAH, los 11 estados iniciaron con los procesos y las gestiones para dichos seguros. Contó que, para tal efecto, el Centro INAH se dividió en 10 regiones que corresponden al mismo número de arquitectos que trabajan en dicho instituto. Así, el estado se quedó dividido en San Martín Texmelucan, Huejotzingo, San Pedro y San Andrés Cholula, Atlixco, Izúcar de Matamoros, Chiautla de Tapia, las zonas con mayor cantidad, a las que se suman Acatlán, Tehuacán, Amozoc y Puebla capital.
Salvador Camarena refirió que éstas 10 áreas abordan “la complejidad de los inmuebles” y la particularidad de cada zona, ya que no todas presentan la misma problemática de atención. Como ejemplo, es que Acatlán tiene 119 templos, Chiautla un total de 30, Atlixco, 49 y Puebla 97 edificaciones.
A esta división, añadió el funcionario federal, se añade el trabajo hecho en los espacios conventuales de Calpan y Tochimilco, incluidos en el listado de Primeros monasterios del siglo XVI en las faldas del Popocatépetl reconocidos por la Unesco como Patrimonio mundial, a los cuales se les suma Huaquechula.