En los últimos cuatro meses, al menos 15 vehículos extranjeros han sido confiscados en Puebla por autoridades de Comercio Exterior, a pesar de que existe un decreto federal de regularización, denunciaron representantes de los vendedores de dicho tipo de automotores.
Los comerciantes sostienen que la retención de unidades y la imposición de multas de 2 mil 500 pesos por cada recuperación se han convertido en una práctica constante, que impacta directamente en su economía y en su derecho al trabajo.
Juan Romero e Israel Díaz, representantes de vendedores de automóviles americanos, señalaron que la problemática afecta principalmente a trabajadores que emplean sus vehículos como herramienta laboral.
El caso más reciente ocurrió ayer, cuando un comerciante de carne fue interceptado de manera arbitraria mientras transportaba carne hacia Texmelucan. Aunque la familia del afectado acudió a acreditar la propiedad del vehículo media hora después, las autoridades se negaron a recibir la documentación y otorgaron un plazo de 10 días para presentarla. El vendedor perdió su jornada y la mercancía transportada se echó a perder.
“Nos quitan las camionetas y después de cuatro meses dicen: ‘te lo regreso sin problema alguno, tu camioneta está bien’, pero ya nos afectaron”, explicó Romero.
Los afectados consideran injustificado el pago de 2 mil 500 pesos por cada vehículo recuperado, ya que los documentos están en regla y las unidades aparecen en el Registro Público Vehicular, en el Servicio de Administración Tributaria y cuentan con placas.
Sin embargo, las autoridades argumentan que la revisión puede tardar hasta cuatro meses, aunque el proceso sólo requiere entre 15 y 20 minutos.
La inseguridad en Puebla y en el país es otro factor que complica la situación, ya que portar la documentación original en los vehículos para mostrarla a las autoridades representa un riesgo para los propietarios. Los vendedores de autos americanos insisten en que cumplen con todos los requisitos legales y que no ingresan vehículos de manera ilegal ni incurren en anomalías.
En Puebla capital, alrededor de 400 comerciantes han sido afectados por las detenciones y multas, cifra que se eleva a 500 en el interior del estado, en municipios como Tepeaca, Atlixco y Huixcolotla.
Los representantes exigen el cese de lo que consideran una persecución contra los vehículos extranjeros y solicitan a las autoridades estatales permitir el reemplacamiento de las unidades en Puebla, ya que cumplen con la normatividad vigente.
También reiteraron su demanda de respeto al decreto de regularización y que se les permita trabajar sin hostigamiento ni prácticas arbitrarias.