La Fiscalía General del Estado de Puebla (FGE), encabezada por Gilberto Higuera Bernal, enfrenta serias críticas por su desempeño en la impartición de justicia en la Sierra Norte de Puebla.
En un solo día, se registraron tres quejas formales: dos ante la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Puebla (CDH) y una más en la Visitaduría General de la capital. Las denuncias están vinculadas al Ministerio Público adscrito a la agencia de Zacatlán, Fernando Salazar Lucio, señalado por corrupción, abandono de sus funciones y maltrato a las víctimas.
Una de las quejas presentadas relata el caso de Martín Carrasco y sus acompañantes, atropellados el pasado 12 de agosto en la carretera Laguna Ceca, municipio de Ahuazotepec. Según los agraviados, el responsable conducía un vehículo en condiciones deplorables y huyó tras el accidente.
A pesar de que los motociclistas acreditaron la propiedad de sus vehículos, estos fueron retenidos por las autoridades municipales y el Ministerio Público no ha ofrecido avances en la carpeta de investigación FGEP/CDI/UEMSV/ZACATLAN-I001854/2024. Además, los afectados afirman ser atendidos únicamente por un pasante, debido a la ausencia del titular.
Otro caso ocurrió el 20 de noviembre, cuando Arturo Bartolo Muñoz Cruz fue atropellado y perdió la vida en la carretera Ahuazotepec-Zacatlán.
Aunque la Guardia Nacional aseguró inicialmente haber detenido al conductor responsable, la familia del fallecido denunció que nunca hubo un arresto formal y el vehículo tampoco fue puesto a disposición de las autoridades. Este hecho generó otra queja bajo la carpeta FGEP/CDI/UEMSV/ZACATLAN-I/002952/2024.
Las víctimas y sus familias exigen una revisión inmediata del desempeño de los agentes implicados y del funcionamiento de la Fiscalía en general.