Trabajadores rescindidos del gobierno del estado, desde el sexenio del panista Rafael Moreno Valle, urgieron este sábado al mandatario Luis Miguel Barbosa Huerta dar respuesta a sus demandas de reinstalación y pago de salarios caídos por despido injustificado, sin pretextar la pandemia por Covid-19.
Reunidos en el asta bandera del zócalo de la ciudad de Puebla, el dirigente de los Trabajadores Despedidos en Digna Resistencia, Marco Antonio Manzano Ramírez, destacó que se cumplen cinco años luchando por el derecho al trabajo y un año del gobierno de la Cuarta Transformación.
En ese contexto, apeló a la sensibilidad del gobierno de Morena, luego de reconocer que han sido atendidos por el director de Atención Ciudadana del gobierno estatal, Jorge Armando Dávila.
Sin embargo, señaló que el funcionario citado les pide que aguanten hasta que concluya la emergencia sanitaria para que tengan respuesta a sus demandas.
“Hemos sido un movimiento pacífico, respetuoso y de diálogo, pero estamos dispuestos a llegar a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos”, advirtió, sin perder la confianza que habrá respuesta con Barbosa Huerta.
Asimismo, destacó que la urgencia es porque en el mes de septiembre se cierra el presupuesto, y si no hay una contestación favorable lo más probable es que pase otro año sin ser reinstalados.
“La petición es desesperada, para que se busquen alternativas de solución; queremos que se nos garantice el derecho humano al trabajo, a la salud, al trato digno y no discriminatorio, porque se han muerto compañeros luchando sin obtener respuesta”, demandó.
Marco Antonio Manzano informó que la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CDH) les notificó el pasado 10 de agosto que su queja fue admitida y que van a solicitar a las autoridades responsables que informe y presente pruebas para que la denuncia prospere por violentar sus garantías.
El dirigente expuso que por muchas décadas han sido trabajadores del gobierno estatal, que han pasado por diferentes etapas y administraciones, sobreviviendo a situaciones difíciles de corrupción y abusos de gestiones anteriores, y ahora son sobrevivientes de una pandemia.
Por esta razón, habló también a nombre de los jubilados, quienes al igual que el magisterio estatal, reciben atención médica en el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado de Puebla (ISSSTEP), donde denunciaron que no se les otorga un trato indigno.
“Lamentablemente hay jubilados de primera y de segunda, pues siempre da preferencia al magisterio tanto en servicio médico como en prestaciones; es muy triste ver como se nos hace a un lado de muchos beneficios, cuando deberíamos ser tratados con apego estricto a un sentido de equidad y justicia, lo cual no se ha dado”, reclamó.
Por lo que pidió al gobernador que no deje en el abandono a los burócratas jubilados y pensionados.
En ese sentido, solicitó aumento a este gremio en la misma medida que le fue otorgada al magisterio, con retroactividad al mes de enero.
“No tenemos mayores ingresos que nuestra pensión, y con esta pandemia ahora ni el servicio médico se ha regularizado porque el hospital fue reconvertido para atender solo a pacientes con Covid-19; también se ha presentado desabasto de medicamentos y egreso mayor de nuestra parte”, enfatizó, al último.