En lo que va del presente año ha incrementado 37.1 por ciento el precio de la tonelada de maíz y hasta 33 por ciento el del kilo de tortilla.
El grano estaba en 7 mil pesos en enero y actualmente se encuentra hasta en 9 mil 600 pesos, indicó Elvira Blanco Sánchez, representante en Puebla de la Cámara Nacional de la Industria de la Masa y de la Tortilla.
Refirió que no hay un aumento generalizado de esta última, pues depende de los costos de operación de cada establecimiento, pero en los que estaba a 12 pesos a inicios de año, ahora ya venden el kilo en 15 o 16 pesos, es decir que incrementó entre 25 y 33 por ciento.
Aunque también dijo que hay tortillerías en donde continúa expendiéndose a 12 pesos, pues Puebla es uno de los estados con los precios más bajos; mientras que en otras se comercializa a 18 pesos.
Acotó que aunque no quisieran hacerlo, ya que les impacta en sus ventas, de continuar los incrementos tanto en maíz, como en gas, electricidad y papel, tendrán que subir todavía más el precio de dicho alimento.
En ese contexto, reprochó que en tiendas de autoservicio se llegue a ofrecer el kilogramo hasta en 10 pesos.
En opinión de la representante, eso solo tiene dos explicaciones: obtienen mejores precios de insumos al comprar por volúmenes grandes o el gobierno las está subsidiando.
Elvira Blanco refirió que lo que ha ayudado a los industriales de la masa a enfrentar ese tipo de competencia, es que la gente sabe que la calidad que se ofrece en los supermercados es baja porque contiene conservadores y químicos que pueden llegar a causar cáncer; mientras que el producto de las tortillerías tradicionales está libre de agentes dañinos.
“Nunca va a ser igual un alimento natural a un alimento ya procesado y con químicos, es un abismo entre un producto y otro, que a lo mejor el gobierno no prevé…. conservadores y blanqueadores y todo lo que conlleva hacer un producto que no se eche a perder”.
Abundó que el consumidor debe estar consciente de eso, toda vez que si ahora se ahorran unos pesos, más tarde podría presentar problemas de salud por consumir tortilla altamente procesada.
Asimismo, Blanco Sánchez consideró insuficientes las 200 mil toneladas que en una primera etapa contrató Seguridad Alimentaria Mexicana (Segalmex) para evitar más incrementos de maíz.
Explicó que esa cantidad es para todo el país y cuando menos cada tortillería consume una tonelada del grano a la semana.
De acuerdo a Data México, Puebla ocupa el tercer lugar nacional con la mayor cantidad de unidades económicas que se dedican a la elaboración de tortillas y pan, con un total de 17 mil 530.