La resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación confirmó la constitucionalidad de exigir seguro de responsabilidad civil para daños a terceros en Puebla, pero la elección del monto y calidad de las pólizas depende del usuario y la aseguradora, lo que favorecería la contratación de las más económicas e insuficientes ante siniestros graves.
El mercado ofrece seguros de responsabilidad civil anuales básicos por menos de 5 mil pesos y el pago daños a terceros por solo 500 mil pesos, pero también hasta por 4 millones de pesos. Sin embargo, hay productos que excluyen daños materiales al vehículo asegurado y robo total, dejando la protección en el mínimo legal exigido.
No todas las aseguradoras aceptan vehículos antiguos y aquellas que lo hacen solo ofrecen el seguro de responsabilidad civil, sin respaldo para robo ni daños propios.
Joaquín Osorio, agente especializado en el sector, advierte que “es común asegurar vehículos de 1960 únicamente por responsabilidad civil; la oferta para autos de más de 25 años de antigüedad es cada vez más exclusiva y limitada”. Este tipo de pólizas mínimas perpetúa la exposición financiera de los conductores que no acceden a productos intermedios o integrales.
La ley fue impugnada por la Comisión de Derechos Humanos del Estado en la Acción de Inconstitucionalidad 1/2024, pero la Suprema Corte la avaló y justificó por seguridad vial. El artículo 164 estipula multas por falta de seguro, pero ni la ley ni el reglamento fijan el monto para particulares, permitiendo pólizas de bajo costo y escaso respaldo.
Osorio puntualiza que, en Puebla, “hay seguros desde 3 mil pesos que sólo cubren 500 mil pesos por responsabilidad civil. Esa cantidad no alcanza para reparar daños en caso de muerte ni cubrir gastos de autos nuevos o de lujo”.
Aunque existen productos con sumas aseguradas superiores, la norma permite cumplir con lo mínimo y sin exigencia de límites: “El Estado de Puebla no marca un mínimo para particulares, sólo para transporte público, carga y pasajeros”, añadió.
Seguros pueden resultar inaccesibles
La revisión del mercado de seguros de responsabilidad civil revela una notable variedad de precios y servicios, en función también de modelos y tamaños de los vehículos.
Tomando como ejemplo asegurar un automóvil Jetta 2025, los montos van desde poco menos de 5 mil pesos hasta más de 25 mil pesos, dependiendo de la amplitud de la cobertura.
Por ejemplo, en Banorte el precio llega a los 25 mil 138 pesos anuales, que incluyen responsabilidad civil por daños a terceros por 4 millones de pesos, servicios de asistencia personalizada, auto sustituto, cobertura de bolso en caso de que ese haya quedado dentro del vehículo robado y enviar un chófer en caso de que el contratante de la póliza se sienta mal para manejar.
Mientras que en un rango intermedio, está Allianz que promueve seguros con primas de alrededor de 10 mil 800 pesos al año, con respaldos mayores que los básicos pero lejos aún del espectro de servicios integrales. Ofrecen suma asegurada para daños materiales y robo total por 486 mil pesos, responsabilidad civil hasta 3 millones de pesos y gastos médicos por 100 mil pesos.
La variedad y el desfase entre precios confirman que, actualmente en Puebla, la seguridad real proporcionada por un seguro de responsabilidad civil depende directamente del poder adquisitivo del conductor; una realidad que perpetúa el riesgo desigual en el tránsito y que expone, en mayor medida, a quienes sólo pueden cubrir pólizas mínimas.
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