El secretario de Salud del estado, José Antonio Martínez García, reconoció los dos casos de sobredosis de fentanilo en Puebla; sin embargo, aclaró que estos ocurrieron antes de la llegada de la actual administración.
Lo anterior, en respuesta a una solicitud de información pública que reveló esta casa editorial, en el sentido de que el Centro Estatal de Salud Mental registró la rehabilitación de dos jóvenes de 20 años con sobredosis de fentanilo, “la droga zombie”, en 2017 y 2018.
Al respecto, el servidor público reconoció que ambos casos se dieron en 2017 y no en la actualidad.
“Sí hubo casos, pero de 2018, 2019, 2020 y la fecha no hemos tenido ninguno por intoxicación con Fentanilo”, afirmó.
En entrevista, dijo que se trabaja con la Secretaría de Educación Pública (SEP) en programas preventivos para evitar el consumo del fármaco por su alta adicción.
“A partir de diciembre del año pasado, la Ssa y la SEP hemos trabajado por medio de la Dpris (Dirección de Protección contra Riesgos Sanitarios), vamos a las escuelas, fomentamos la problemática de consumir medicamentos, como Clonazepam, los efectos secundarios y continúan estas pláticas”, afirmó.
Por lo que hizo un llamado a la sociedad a estar al pendiente de la disponibilidad ilegal de esta “terrible droga”, luego de destacar que para uso clínico el fármaco es muy eficiente en cirugías.
No obstante, alertó que, de forma ilegal, el consumo fentanilo es peligroso porque podría causar la muerte debido a su alta adicción.
Además, destacó que en el Centro Estatal de Salud Mental se cuenta con un paidopsiquiatra de la talla del especialista Fernando Leyva, que trabaja coordinadamente con los gobiernos municipales en programas preventivos de acciones en menores.
Por otro lado, el secretario de Salud del estado expuso que hay candados para impedir que haya venta ilegal de fentanilo o clonazepam.
“Se pide la receta, los datos del médico, la cédula profesional, porque el clonazepam es un medicamento de seguridad grado dos, y el fentanilo es grado tres, tiene mayor complejidad para poder suministrarse”, informó.
José Antonio Martínez dijo que hasta el momento tampoco tiene registro o el reporte de algún médico que se estén prestando para la compra de medicamentos.
Al final, destacó que la Dpris actúa en la revisión de establecimientos legalmente constituidos, y si detectan que una farmacia está vendiendo de manera indiscriminada algún tipo de medicamento, se procede a su suspensión.
“Cuando son establecimientos clandestinos son responsabilidad del ayuntamiento, que se entera donde se están vendiendo fármacos, en la Cuchilla, o en un lugar donde no deben de existir estos negocios”, afirmó.