La delegación Puebla de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI) se quedó sin dinero para la atención de pueblos y comunidades indígenas en todo el estado.
En plena temporada invernal, la dependencia no tiene recursos para ayudar a quienes recurren a los albergues de esta dependencia federal, ubicados en las zonas indígenas de la entidad.
La CDI cuenta con 89 albergues en el interior del estado y atienden a una población de 4 mil 500 niños, a los que se les apoya, presumió, con el hospedaje y tres alimentos.
Puebla tiene una población de un millón 18 mil 397 indígenas, lo que representa el 18 por ciento de la población total de la entidad.
El delegado Juan José Tapia González reconoció que se quedó sin dinero desde hace un mes para operar lo que restaba de este 2013.
El funcionario federal reconoció también que el albergue más grande del estado, ubicado en el municipio de Eloxochitlan, no ha podido inaugurarse por trámites administrativos y los 150 niños indígenas que acuden a la Casa del Estudiante, con clave 21TCE0002R, soportarán el invierno en el inmueble de madera y cartón al que han acudido por años.
Tapia González, quien sí invirtió en la remodelación de su oficina, afirmó que continúa esperando a que el gobierno del estado de Puebla integre sus programas de apoyo a este sector de la población, bajo la justificación de que no deben existir programas duplicados.
“Haremos las gestiones para saber sobre quién va a recaer la responsabilidad de poder apoyar, por ejemplo, con cobertores”, añadió.
Mientras tanto, en Eloxochitlán un grupo de más de 150 indígenas de la Sierra Negra de Puebla ha esperado por meses usar las nuevas instalaciones del albergue que se construyó con recursos federales y estatales.
Este espacio no ha sido ocupado por un mero acto protocolario: ninguna autoridad de ambos niveles de gobierno ha acudido a inagurarlo.
A pesar de que ya está concluido el nuevo edificio, mejor equipado con cocina, dormitorios y techo sin goteras, tienen que esperar en el viejo albergue semi destruido donde se refugian del frío y la lluvia de la temporada.
Ese albergue también recibe a jornaleros agrícolas de Eloxochitlán y otros muncipios aledaños, así como del estado de Veracruz, que esperan a que lleguen los camiones que los transportarán a Sonora y Sinaloa a las plantaciones agrícolas donde cortarán algodón, jitomate y uvas.