En la localidad de Zacamila, perteneciente a Huauchinango, cerca del establecimiento conocido como “La Pulcata”, y en las colonias adyacentes como Chapultepec, La Mesita y La Santa Dora, los residentes han manifestado su enojo por la carencia de agua potable que persiste desde hace más de una semana. Según los afectados, el problema comenzó el 2 de mayo, cuando se reportó una fuga significativa del líquido.
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Vecinos del área detallaron que tras la denuncia inicial, personal de la Empresa de Servicios de Agua Potable de Huauchinango (ESAPAH) acudió para reparar la fuga. Sin embargo, después la intervención, cerraron el suministro y desde entonces, el agua no ha vuelto a las viviendas.
Los habitantes han intentado contactar repetidamente al ayuntamiento para resolver esta situación crítica, pero no han recibido respuesta alguna. “Estamos desesperados. Con las temperaturas alcanzando los 40 grados, no tenemos ni siquiera cómo refrescar a los niños o asegurar agua hervida para beber,” comentó una de las residentes afectadas.
La falta de acción por parte de las autoridades locales ha aumentado el descontento en la comunidad, especialmente en un contexto donde el presidente municipal, Rogelio López Angulo, está en campaña para la reelección. Según los ciudadanos, la gestión del agua ha empeorado considerablemente en los últimos tres años bajo su administración.
La crisis de agua potable en Huauchinango alcanzó un punto crítico el pasado miércoles cuando residentes de las colonias Vima y Zacamila, entre otras, decidieron bloquear el boulevard Zacamila. La manifestación surgió como respuesta a la carencia de acceso a agua potable, un recurso esencial que ha sido escasamente distribuido por las autoridades locales.
La presión de la protesta ciudadana llevó al gobierno municipal, liderado por el presidente Rogelio López Angulo, a tomar medidas temporales. “Milagrosamente, después de la manifestación, decidieron abrir las válvulas de abastecimiento, pero solo por unos minutos antes de cerrarlas nuevamente”, comentó un residente afectado. Este breve suministro no ha hecho más que aumentar la frustración entre los habitantes, quienes ven sus necesidades básicas politizadas y no atendidas adecuadamente.
La comunidad de Huauchinango espera que tanto el ayuntamiento como ESAPAH actúen de manera urgente para restaurar el suministro de agua, considerando que la escasez afecta profundamente la vida diaria y la salud de los vecinos en estas zonas de elevada temperatura.


