Tehuacán. Un socavón de ocho metros de diámetro y siete de profundidad, más otros dos de menor tamaño, se abrieron en la colonia Antorchista de Tehuacán, esto sobre el camellón de la calle principal de ese asentamiento irregular. Según Protección Civil y Bomberos este problema derivó por el reblandecimiento del subsuelo secundario a galerías filtrantes que cruzan la zona, debido a las constantes lluvias que han caído en las semanas recientes, a lo que se suma la sobre explotación de la tierra.
El socavón mayor se ubica a unos 20 metros de viviendas y podría generar el derrumbe de dos árboles de más de 15 metros de altura. Los tres sitios donde se dieron esos hundimientos fueron acordonados por Protección Civil municipal cuyo director, Jerónimo Mercado Cañedo, expuso que se hará un estudio detallado para determinar las acciones a seguir.
Los hechos ocurrieron el pasado jueves por la noche, tras una intensa lluvia, los vecinos refirieron que la tierra se hundió en ese punto; un día antes se dieron cuenta de que había una grieta tanto en ese sitio como en otro más que está a unos 200 metros de distancia, sobre el mismo camellón.
Al respecto Jerónimo Cañedo resaltó que todo ese camellón es de galerías filtrantes y la tierra y el agua buscaron su cauce por la humedad provocando esos hundimientos, que hasta el momento suman tres.
Como una primera acción se acordó junto con los ejidatarios de la colonia, poner una especie de barrera de tierra a fin de que el agua de las lluvias subsecuentes no termine en ese hueco, tal como ocurrió la noche del jueves, puesto que ello puede provocar que se haga más hondo.
Uno de los dos árboles tiene la mitad del tronco dentro del socavón y la tierra que le rodea ya luce agrietada, por lo cual el acordonamiento abarca ambos árboles, ante el riesgo de que se puedan derrumbar, algo que llevaría a ampliar el diámetro.
La colonia Antorchista es una de las más grandes, se ubica cerca de la autopista Cuacnopalan–Oaxaca, está en calidad de irregular, puesto que todas esas tierras no están consideradas para uso habitacional, sin embargo, deben ser más de 100 familias las que habitan en esa zona, la cual incluso ya cuenta con escuelas.
En varias ocasiones sus líderes han exigido a las autoridades municipales que se les dote de servicios públicos, como agua potable, alcantarillado sanitario y alumbrado público, llegando hasta amenazar con protestas como el cierre de calles para obligar a que sus demandas sean atendidas.