Por mayoría de votos, diputados locales aprobaron el decreto que la Cámara de Senadores para que el presidente de la República pueda ser juzgado por los delitos de traición a la patria, hechos de corrupción y delitos electorales.
El tema confrontó a los legisladores emanados de Morena y a los de bancadas de oposición, como el PAN y el PRI, quienes aseguraron que la reforma planteada por la Cámara alta no significa la eliminación del fuero constitucional para el jefe del Ejecutivo, sino una ampliación de la figura penal por la que éste puede ser juzgado.
Los diputados morenistas defendieron que el decreto, el cual reforma la Constitución Mexicana, busca que haya un “piso parejo” entre el presidente de la República y el resto de los ciudadanos, así como terminar con la impunidad que, aseguraron, existían en otras administraciones pero no en la Cuarta Transformación.
Los legisladores de oposición, como la diputada priista Rocío García Olmedo criticó que la reforma no implica la eliminación de la figura del fuero constitucional, sino únicamente la ampliación de las figuras penales por las que el presidente puede ser juzgado.
En el mismo sentido se refirió la legisladora panista Mónica Rodríguez Della Vecchia, quien señaló que Morena pretende engañar a la ciudadanía, pues la reforma no considera la eliminación del fuero.
La diputada Rafaela Vianey García Romero reviró que cuando el PAN tuvo la mayoría en el Congreso local no se aprobaron ese tipo de reformas, por el contrario, se dio luz verde a la llamada Ley Bala.
La legisladora aprovechó para criticar la alianza que formaron el PAN, el PRI y el PRD para las elecciones de 2021, al señalar que se mezclarán el agua y el aceite y que es una muestra más de su incongruencia.
Finalmente, el decreto fue aprobado con 32 votos a favor, cinco en contra y una abstención, con lo que el Congreso poblano se convirtió en el décimo en aprobar el decreto enviado por la Cámara de Senadores.