Personal de custodia insuficiente, actividades al margen de la ley, extorsiones, sobornos, instalaciones deficientes, falta de programas de reinserción y hasta autogobiernos, detectó la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) en las cárceles poblanas.
El organismo presentó los resultados de su Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria (DNSP) correspondientes a 2022, evaluación en la que las cárceles poblanas se colocaron entre los de peores condiciones en el país, pues obtuvieron la quinta calificación más baja, la cual fue de 5.02 puntos en una escala de cero a 10, después de Guerrero, 4.92; Zacatecas, 4.70; Hidalgo, 4.63 y Tamaulipas, 4.26.
De acuerdo con los resultados de la evaluación, la cual analizó 16 centros penitenciarios de la entidad poblana, la constante en estos inmuebles es que el personal de custodia es insuficiente, así como que se realizan actividades que están al margen de la ley –aunque no se detallan cuáles–, además de extorsiones y sobornos.
Destaca el caso del penal de Tecali de Herrera, pues en este sitio se detectó la presencia de autogobierno, es decir, los reclusos imponen sus leyes.
En todas las cárceles se indica que hay falta de una separación adecuada entre sentenciados y procesados, además, no hay suficientes actividades de reinserción tales como práctica del deporte o trabajos que representen un ingreso para los internos.
La revisión también detectó que en todos los centros hay carencias en la alimentación, falta de atención médica y deficientes condiciones materiales e higiene de la cocina y/o comedores.
Otras de las características de los resultados se centraron en la falta de prevención de violaciones a derechos humanos y de atención en caso de detección, hacinamiento, insuficiencia de programas para la prevención y atención de incidentes violentos.
La Comisión detectó también que hay escasa atención a grupos vulnerables como las mujeres, personas homosexuales, de la tercera edad e indígenas.
De los 16 centros evaluados, 13 tuvieron calificaciones reprobatorias, los cuales son: Huejotzingo, con 3.12; Tecamachalco, con 4.60; Chignahuapan, con 4.26; Libres, con 4.91; Huejotzingo, con 3.12; Tepeaca, con 4.99; Xicotepec, con 4.98; Tecali, con 5.37; Puebla, con 4.16; Tehuacán, con 5.40; San Pedro Cholula, con 4.93; Huauchinango, con 5.07; Zacatlán, con 4.10 y Acatlán de Osorio, con 4.65.
Los tres centros que se ubicaron a media tabla son: Ciudad Serdán, con 6.75; Teziutlán, con 6.56 y Tlatlauquitepec, con 6.43.
De los seis rubros que contempla la medición, los cuales son integridad de los reclusos, una estancia digna, condiciones de gobernabilidad, reinserción social y necesidades específicas, la entidad resultó reprobada en todas.
El secretario de Seguridad Pública, Daniel Iván Cruz Luna, fue interrogado sobre el tema durante la conferencia de prensa de este lunes del gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina, a lo que rechazó que haya autogobiernos en las cárceles de Puebla.
Por otra parte, indicó que la información recabada por la CNDH corresponde a antes de mayo de 2022, por lo que dijo que en los meses subsecuentes se subsanaron muchas de las deficiencias detectadas, lo que se reflejará en la evaluación del próximo año.