Hasta el momento, la Secretaría de Energía (Sener) no ha respondido a Gasolineros Unidos de Puebla y Tlaxcala (GUEPT) sobre la petición de una reunión para abordar el problema que tiene Pemex para el reparto de diesel y gasolinas. A algunas estaciones de servicio que operan con franquicia de la paraestatal ha dejado de surtirles hasta el 65 por ciento de lo que regularmente le compran, generando que cuando menos tres se hayan quedado sin combustible.
El pasado 6 de mayo, la agrupación envió una misiva a Luz Elena González, titular de la Sener, explicando la situación que atraviesan las gasolineras; la misma, también fue dirigida al diputado local por Morena, Julio Miguel Huerta Gómez, quien se comprometió a gestionar reuniones con legisladores integrantes de las comisiones de Energía del Senado de la República y de la Cámara de Diputados, sin que hasta ahora haya fijado fecha y hora.
Luz María Jiménez Almazán, presidenta de GUEPT, manifestó a La Jornada de Oriente que no pueden esperar más tiempo para tener respuestas del gobierno y de diputados y senadores, puesto que el problema podría seguir escalando y generar desabasto que afectaría a prácticamente toda la población, debido a que se vería interrumpido el traslado de mercancías y el servicio de transporte público.
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“No podemos esperar, urge solución al problema, por el bien de todos. Ojalá contesten porque parece que la línea es ignorar el problema hasta que explote”, declaró.
Hasta el momento, tras hacer pública su denuncia y la carta enviada a la secretaría de Energía, lo único que ha obtenido GUEPT son disculpas por parte de las empresas que comercializan el combustible de Pemex, como HAMSE y Lemargo, las cuales además han dicho a la agrupación que no pueden hacer nada al respecto para resolver el problema de reparto.
Cabe recordar que las comercializadoras solo se encargan de revender el combustible de Pemex y la paraestatal, de distribuirlo.
Luz María Jiménez añadió que, según trascendió, el problema para hacer llegar las gasolinas y diésel a la estaciones de servicio estalló porque Pemex no ha pagado la renta de pipas, por lo que son escasos los vehículos para hacer los traslados.
