Las dos personas aprehendidas durante los cateos que el jueves realizó la Fiscalía General del Estado (FGE) en Quecholac y Palmar de Bravo, permanecen en prisión preventiva justificada, según lo determinó el juez a cargo del caso en una audiencia realizada este fin de semana.
Sin embargo, la situación jurídica de Antonio Flores Porras y Delfino Ramírez Enríquez será definida en una segunda audiencia debido a que su defensa solicitó la duplicidad del término constitucional de 144 horas para ampliar la investigación.
El 21 de octubre la fiscalía informó que realizó cateos en los dos municipios mencionados –los cuales forman parte de la zona delictiva del estado conocida como Triángulo Rojo– como parte de una investigación que sigue en torno al líder huachicolero Antonio Valente Martínez Castillo alias “ El Toñín ”.
Como resultado del operativo, fue descubierto un túnel, se decomisaron ocho armas, 100 cartuchos útiles, droga y además fueron detenidos dos hombres.
Este fin de semana se realizó una audiencia en el Centro de Justicia del municipio de Tehuacán, en donde el juez a cargo dijo que fue legal la detención de los dos sujetos y determinó en su contra prisión preventiva necesaria o justificada, bajo el delito de resistencia de particulares y portación de arma de fuego sin licencia.
La fiscalía pruebas presentó ante el juez para que los dos detenidos sean vinculados a un proceso penal, pero la defensa de los mismos recurrió a la ampliación del periodo constitucional para desahogar la indagatoria.
De esa forma los dos señalados fueron enviados al penal de Tehuacán bajo la medida de prisión preventiva oficiosa o justificada.
Hay que recordar que actualmente se encuentra preso el alcalde de Quecholac, José Alejandro Martínez Fuentes, señalado los delitos de abuso de autoridad, ejercicio indebido de funciones públicas y delitos contra el funcionamiento del Sistema de Seguridad Pública.
De igual forma ocho policías de Quecholac fueron detenidos y vinculados en un proceso por el ejercicio indebido de funciones y usurpación pública, aunque se presume que también protegían a “El Toñín”.
El alcalde es hermano de Antonio Valente Martínez Fuentes, un productor de hortalizas del municipio de Quecholac que también es señalado de ser un líder de grupos dedicados a la ordeña de combustible en la zona.