La imposición de aranceles en Estados Unidos a vehículos ensamblados fuera de ese país preocupa a Hugo Tlalpan Luna, secretario general del Sindicato Independiente de Trabajadores de la Industria Automotriz Volkswagen (SITIAVW), debido a las consecuencias para las plantas automotrices y la cadena de proveeduría en el estado de Puebla. Sin embargo, dijo confiar en que la presidenta Claudia Sheinbaum logre una buena negociación con su homólogo Donald Trump.
Este último anunció gravámenes de hasta 25 por ciento a los automotores, pero a esta proporción –mediante una fórmula– se le restará el valor de las autopartes estadounidenses con las que hayan sido manufacturadas las unidades en México.
El líder gremial manifestó que los aranceles están causando incertidumbre y que, de aplicarse, podrían aumentar en una cuarta parte el precio de los vehículos en Estados Unidos, mientras que México sufriría afectaciones en otros aspectos no precisados.
Puedes leer: Líder de SITIAVW admite no haber rendido cuentas y alega que sus críticos están en campaña
“El trabajo que está haciendo el gobierno es loable, es admirable y confiamos en que se diriman bien todas estas situaciones en el aspecto arancelario. Imagínense si se llegara a aplicar este 25 por ciento adicional, un producto elaborado aquí en México allá en Estados Unidos aumentaría una cuarta parte, obviamente eso daría pie a muchas situaciones”.
En medio de esta tensión comercial con Estados Unidos, Tlalpan Luna comentó que organizaciones gremiales que pertenecen a la Federación de Sindicatos Independientes de las Industrias Automotriz, Autopartes, Aeroespacial y del Neumático (FSIIAAAN) buscan que se tome en cuenta su opinión en una futura renegociación del T-MEC.
Expuso que en anteriores ocasiones el gobierno solo ha considerado a las centrales oficialistas, por los acuerdos que llega a tener con ellas, y ha excluido al sindicalismo independiente.
Te puede interesar: Agremiados al SITIAVW exigen rendición de cuentas de cuotas sindicales y bienes del organismo gremial
Añadió que ya tienen varias propuestas para el tratado comercial, especialmente en el capítulo laboral, pero indicó que más adelante las revelará.
“Nosotros tenemos ideas y aportaciones porque sí hay algunas ideas que se han presentado, que no vemos bien dentro de la industria automotriz… Hay que ser honestos. ¿A quiénes normalmente les hacen caso? A las centrales tradicionales, por no decir otra cosa, por la magnitud de agremiados que tienen, las componendas que hay. No sé por qué normalmente a ellos se les da un lugar y al sindicalismo independiente, que es honesto y transparente con la base, se le cierran las puertas”, externó.
Para 2026 está programada la revisión del T-MEC, en la cual los tres países participantes decidirán si amplían su vigencia por seis años o realizan revisiones anuales hasta su finalización en 2036.