Por quinto año consecutivo colocan el “árbol de la esperanza” con las fotos de personas desaparecidas 

Por quinto año consecutivo, el Colectivo Voz de los Desaparecidos colocó el “árbol de la esperanza” en el zócalo de Puebla, que tiene colgadas fotografías de personas no localizadas, para recordar a las autoridades la deuda que tienen pendiente con sus familiares, y a las cuales exigieron un mayor compromiso para dar con su paradero.  

A partir de este domingo y hasta principios del próximo año, decenas de imágenes de personas que no han regresado a sus hogares penderán de un árbol del primer cuadro de la ciudad, en señal de protesta por parte de sus familiares pues el Estado no ha dado con su paradero.  

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Vestidos con playeras blancas, desde temprana hora los afectados acudieron al zócalo a colocar las fotografías en un árbol que está frente al Palacio Municipal, y, a diferencia de años anteriores, en esta ocasión no fueron interrumpidos por autoridades municipales.  

En su intervención, María Luisa Núñez Barojas, representante de la agrupación, señaló que son cientos de personas víctimas de desaparición en Puebla, fenómeno que va al alza sin que alguna autoridad cuente con un plan efectivo para evitarlo.

“Son personas, no son esferas, son padres, son madres, son hijos. Una vez más en esta navidad su silla vacía los sigue esperando en casa”, expresó.  

De manera particular, este año, Núñez se refirió al caso de Esmeralda Gallardo, la “madre buscadora”, quién, de acuerdo con la investigación que la Fiscalía General del Estado (FGE) realizó sobre el caso, fue asesinada a tiros el cuatro de octubre de 2022 por Cristopher N. alias “El Cris” e Ismael N. alias “El Pá” o “El Óreo”, en calles de la Unidad Habitacional Villa Frontera, cuando ella salía a trabajar. 

El asesinato de la mujer se dio después de que en medios de comunicación señalara los nombres de las personas que posiblemente son responsables de la desaparición y muerte de su hija Betzabé, ocurrida en enero de 2021.  

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La activista indicó que una de las personas detenidas por la desaparición de la hija de la “madre buscadora” recibió una sentencia de 28 años en prisión, pero eso no devolvió la libertad a la joven desaparecida, por lo que resaltó que un resolutivo de ese tipo no necesariamente equivale a justicia para las víctimas.  

Familiares de otras personas reportadas como desaparecidas dijeron no perder la esperanza de encontrarlos pese a que en algunos casos han pasado años. Exigieron a las autoridades cumplir con su trabajo de procurar la seguridad de la ciudadanía y evitar que más personas sean privadas de su libertad o que les pase algo fuera de sus hogares que les impida regresar a los mismos.  

Tras el reciente cambio en el titular de la Comisión de Búsqueda, la representante de la agrupación indicó que el nuevo comisionado Luis Javier Cervantes Gómez ha atendido las peticiones de los familiares, por lo que ahora el llamado es la FGE así como a las policías municipales para que intensifiquen su participación en las búsquedas.