El alcalde de la ciudad de Puebla, Adán Domínguez Sánchez, confirmó que uno de los comerciantes que bloquearon el lunes por la mañana la avenida 11 Sur, a la altura de Reforma, fue detenido por agredir a policías municipales y puesto a disposición del Ministerio Público.
Domínguez Sánchez destacó que desde las 10 de la mañana el gobierno municipal se acercó para entablar diálogo con los comerciantes que exigían la reapertura de calles en el Centro Histórico, las cuales habían sido cerradas para impedir la instalación del comercio informal.
Sin embargo, ante la negativa de entablar diálogo, a las 11 de la mañana la Policía Municipal, en coordinación con la estatal liberó la vialidad y la corporación detuvo a uno de los manifestantes, quién fue puesto a disposición del ministerio público.
Cabe resaltar que según versiones de testigos de la detención, se trata de Pavel Tobón, representante de los Empresarios Establecidos del Centro Histórico, organización que protestó por el cierre de vialidades.
Asimismo, Adán Domínguez sostuvo que se tendió una mesa de diálogo con los comerciantes que buscaron el diálogo con la Secretaría de Gobernación municipal para buscar una solución al conflicto.
“Estamos abiertos al diálogo siempre y cuando se beneficie el interés colectivo de las personas. Estamos en total disposición y así hasta el último día de gobierno”, acotó.
El pasado 2 de septiembre, decenas de empresarios establecidos del Centro Histórico bloquean la 11 Sur a la altura de la avenida Reforma para exigir la reapertura de la 6, 8 y 10 Oriente-Poniente, debido a que el bloqueo les ha provocado una caída de más de 50 por ciento en sus ingresos.
Desde las 7 de la mañana los afectados colocaron vehículos para impedir la circulación en la 11 Sur, a la altura de la avenida Reforma, lo que generó un severo conflicto vial, debido a que se trata de una de las avenidas de mayor circulación de la ciudad.
Ante el cierre de la avenida no pudieron circular las unidades de la Red Urbana de Transporte Articulado (RUTA), por lo que cientos de usuarios caminaron para llegar a sus trabajos o escuelas en la zona del Paseo Bravo.
Jaime Maldonado, uno de los afectados, afirmó que el cierre de las calles para impedir la instalación del comercio informal, el cual se ha prolongado desde mediados de agosto, les ha producido una caída en sus ingresos de más de 50 por ciento, una afectación para 300 comerciantes.
Agregó que se trata de diferentes giros comerciales como estacionamientos, ferreterías, boneterías, vestidos de novia, entre otros, de los cuales los primeros han tenido una reducción de hasta 90 por ciento.