En torno al anuncio de que cuatro piezas del acervo del Museo de Sitio de la Zona Arqueológica de Ndachjian-Tehuacán representarán a Puebla en la exposición La Grandeza de México, investigadores de la sección de Arqueología del Centro del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en Puebla afirmaron que éstas “regresarán en tiempo y forma” a su lugar de origen, luego de su exhibición en la Ciudad de México.
Con ello, los arqueólogos Francisco Mendiola Galván, Rosalba Delgadillo, Silvia Martínez, Alberto Diez Barroso, Mauricio Gálvez Rosales y Sergio Suárez Cruz rechazaron el argumento de la arqueóloga Nohemí Castillo Tejero, investigadora del sitio, quien dijo que éstas podrían no volver a su lugar de origen.
Por medio de un comunicado, respondieron a las declaraciones hechas en este diario por Nohemí Castillo, quien se opone al traslado de las piezas pues “quitar las piezas del Museo de Sitio implica romper con toda la explicación de la historia de la zona y de prácticamente la región completa, ya que esas piezas son parte fundamental para entender la cultura y vida social de los popolocas”.
En el documento los investigadores del Centro INAH Puebla señalan que las declaraciones de Castillo “ponen en duda la calidad moral de los investigadores de este centro de trabajo, así como del director del Museo de sitio de Tehuacán”.
Lo anterior, añaden, porque han “estado participando de manera activa y responsable para que las esculturas regresen en tiempo y forma”.
Refieren que, como investigadores, al lado del director del museo de sitio, “hemos mantenido un vínculo directo entre las autoridades del mismo INAH y municipales junto con la sociedad civil, realizando las gestiones y acuerdos para que las esculturas sean devueltas a Tehuacán una vez concluida la exposición temporal” que se montará en próximas fechas en el Museo Nacional de Antropología y en la sede de la Secretaría de Educación Pública, en la Ciudad de México.
Los arqueólogos del Centro INAH Puebla indican que “de no llevarse a cabo este préstamo las esculturas de todos modos deben resguardarse en la bodega del museo hasta que se cuente con el recurso económico para reparar el domo y el plafón” de dicho recinto.
Destaca que días atrás, también por medio de un comunicado, el INAH y el Centro INAH Puebla informaron que la inclusión de estas cuatro piezas del Museo de Sitio de la Zona Arqueológica de Ndachjian-Tehuacán, fue resultado del “diálogo abierto entre autoridades federales, del estado de Puebla y del municipio de Tehuacán, así como con la participación de asociaciones civiles y público interesado”.
Luego, la arqueóloga Nohemí Castillo expuso que para la magna exposición sería mejor que se llevaran piezas que todavía no se exponen en el Museo de Sitio y que pueden ser útiles, pero sacar las cuatro piezas ya expuestas afectará todo el trabajo y orden que se tiene dentro y fuera del recinto. “Son hallazgos que se exhiben no por bonitos, sino porque gracias a las esculturas se desentraña toda la identidad de Tehuacán”, confió.
Además de señalar que las piezas podrían no regresar al museo, refirió que otro “riesgo es el traslado las cuatro esculturas” pues son “piezas que no pueden llevarse en una caja, se requiere hacer un trabajo realmente cuidadoso ya que una de las esculturas pesa dos toneladas y las otras su peso oscila entre los 1500 y 1800 kilos”.