Un grupo de pastores de ovejas localizó dos cuerpos sin vida, envueltos en bolsas de plástico y con huellas de tortura, en un paraje del municipio de Ahuazotepec, en la Sierra Norte.
El hallazgo se registró la tarde del lunes; sin embargo, la dificultad de acceso a la zona y la ausencia de señal telefónica retrasaron la llegada de los servicios de emergencia y del personal de la Fiscalía General del Estado (FGE).
De acuerdo con el testimonio de los pastores, ellos notaron manchas de sangre en el camino y decidieron seguir el rastro, creyendo que podría tratarse de una persona o un animal herido que necesitara ayuda.
Tras avanzar algunos metros, encontraron dos bultos con forma humana, envueltos en plástico. Ante la situación, optaron por regresar y buscar la manera de contactar a las autoridades.
El acceso complicado a la comunidad demoró la llegada de agentes de la Policía Municipal y de Protección Civil, quienes al arribar confirmaron que se trataba de dos cadáveres. Acto seguido, acordonaron el área y notificaron a la FGE.
Peritos de la dependencia acudieron más tarde y determinaron que el homicidio habría ocurrido ese mismo día por la mañana. Además, verificaron que los cuerpos presentaban lesiones en el rostro derivadas de actos de tortura antes de ser ejecutados.
Las diligencias ministeriales y el levantamiento de los cuerpos se prolongaron hasta la noche del lunes, y fue durante la madrugada del martes cuando se confirmó el traslado de los cadáveres al Servicio Médico Forense (Semefo) de la región, donde se practicarán las necropsias de ley.
Hasta el cierre de esta edición, las víctimas permanecen en calidad de desconocidas. No obstante, las primeras indagatorias forenses apuntan a que fueron torturadas, lo que refuerza la hipótesis de la FGE sobre un presunto ajuste de cuentas.
Cabe recordar que apenas la semana pasada, el secretario de Seguridad Pública (SSP), Francisco Sánchez González, reveló que Ahuazotepec y Huauchinango se han convertido en el epicentro del robo de combustible en el estado.
Según las investigaciones estatales, grupos delictivos que operaban en la zona conocida como “triángulo rojo” se trasladaron a estos dos municipios de la Sierra Norte, donde atraviesan los ductos de Pemex procedentes de Veracruz.
A esto se suma que el pasado 21 de septiembre se registró una balacera en contra de policías municipales de Ixtepec, Huehuetla, Caxhuacan y Atlequizayan mientras instalaban un puesto de control preventivo en la comunidad de El Patiy, habitada por poco más de 650 personas, perteneciente al municipio de Ixtepec. Los uniformados repelieron la agresión y no se reportaron heridos.
De acuerdo con reportes oficiales, los agentes acudieron para colocar el puesto de control en inmediaciones de la escuela primaria Ignacio Zaragoza, en respuesta a constantes denuncias de los habitantes.
Los pobladores han señalado que en la zona es común escuchar detonaciones de armas de fuego, además de observar la presencia de hombres armados en esta región de la Sierra Norte.


